Txotx en jarra y con código QR

El atractivo más significativo de la temporada de sidrerías es degustar la nueva cosecha de pie en las bodegas, junto a las kupelas, y acompañar a los «txotx!» de un buen menú. Este año no podrá ser así. La pandemia ha obligado a la Denominación de Origen Euskal Sagardoa y a las Asociaciones de sidrerías de Gipuzkoa, Bizkaia y Araba a establecer ciertas medidas que modifican el modus operandi de la degustación. Así lo han explicado los representantes del sector en la mañana de este martes en la rueda de prensa celebrada en el Kursaal para presentar la nueva temporada de txotx.

No se beberá de las kupelas. Las sidrerías ofrecerán en la mesa la nueva sidra en jarras y en botellas transparentes, cada una con su correspondiente tarjeta informativa. En las tarjetas figurará el número de kupela y la información de su sidra para que el comensal sepa en todo momento qué sidra está degustando. Las tarjetas, además, incorporan un código QR con el link para acceder a más información del producto.

Vuelve la sidra en jarra. Unai Agirre, coordinador de la Denominación de Origen, apela a un retorno por la tradición sidrera en esta temporada. Los comensales no se podrán levantar de la mesa y servirse desde las kupelas, pierden esa parte de la experiencia, pero «se recupera una antigua forma de consumo», explica Agirre. Este año las sidrerías rescatan una técnica tradicional, servir la sidra en jarra. «Será una experiencia diferente», apunta el coordinador sidrero. No obstante, a lo largo de la comida se podrá levantar el representante de cada mesa y, acompañado de un responsable de la sidrería, rellenar su jarra, para llevar a la mesa la sidra que quieran degustar.

Olatz Mitxelena, representante de las Asociaciones de sidrerías vascas, ha apuntado que en las sidrerías habrá «un protocolo especial» con ciertas pautas para cumplir las normas de seguridad. Las mesas se conformarán con un máximo de seis personas y el servicio se ofrecerá en la mesa. Así, el plato principal se servirá en el centro y un representante de la sidrería repartirá a cada comensal su porción en su plato. Las sidrerías cerrarán a las 20.00 horas.

Mitxelena ha resaltado que las sidrerías «son espacios amplios y seguros» que permiten mantener las distancias de seguridad y disfrutar «de una manera cómoda y segura de la mejor experiencia sidrera».

La cosecha de 2020 ha sido «pequeña» en comparación con la de 2019, ha explicado Unai Agirre. Aún así, la calidad de la sidra no se ha visto afectada, pues «son sidras de gran carácter y cuerpo». Dentro de la Denominación de Origen Euskal Sagardoa se han elaborado 1,2 millones de litros de sidra, «una tercera parte» a la elaborada en 2019.