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Han pasado 25 años pero sigue el misterio sobre la desaparición del pesquero guipuzcoano 'Carreira'. Llevaba diez tripulantes a bordo y faenaba en el ... canal de la Mancha. Salió del puerto de Pasajes después de Reyes. En el aire sigue la pregunta de cómo fue posible que nunca se hallara rastro de un barco de acero con solo seis años de antigüedad y que contaba con una tecnología punta. Parece más un caso propio de El Triángulo de las Bermudas que de un suceso que ocurrió en el caladero La Chapelle, entre las costas de la Bretaña francesa y el suroeste de Inglaterra. Un cuarto de siglo después se recuerda a los fallecidos, la mayoría gallegos, con una emotiva ofrenda floral en Pasaia. Entre los muertos se encuentran un hijo del armador José Carreira - que capitaneaba el barco- que estaba casado con una joven de Pasai Donibane. Otro pasaitarra fue Luciano Erostarbe, hermano del actual patrón de la trainera de San Pedro.
El 'Carreira' fue construido en 1990 en los astilleros Luzuriaga de Pasaia y se convirtió en uno de los primeros barcos pesqueros de acero de la flota guipuzcoana. Tenía 23,65 metros de eslora y una potencia de 235,36 kW (320,0 CV). Era una embarcación que dejaba atrás la historia de los arriesgados arrantzales que salían a la mar en naves de madera.
La búsqueda del barco palangrero provocó uno de los mayores despliegues de búsqueda en las costas europeas. Desde el aire y el mar, helicóptero y barcos de Francia, Gran Bretaña y España rastrearon sin descanso durante 20 días más de 320.000 kilómetros cuadrados de aguas comunitarias. Al final las labores se redujeron a emitir avisos a los buques de la zona mientras las patrulla terrestres permanecen alerta.
El pesquero, con matrícula 3SS-1-2448, tenía previsto faenar en aguas del Canal de La Mancha hasta finales de enero. Durante varias semanas las familias de los tripulantes recorrieron las islas de la zona de Inglaterra en busca de algún rastro sobre el paradero del barco y los pescadores. Uno de los aros salvavidas del barco fue hallado flotando el día 18 cerca de Plymouth.
Ha pasado un cuarto de siglo y todavía no se ha podido determinar una fecha exacta del hundimiento. Los más plausible es que el 'Carreira' desapareciera entre los días 9 y 10 de enero de 1996. El último contacto con el pesquero fue desde la Cofradía de Pescadores de Pasai San Pedro fue un día antes. Hubo problemas con la radio de largo alcance durante la conversación con el armador, José Carreira, natural del pueblo gallego con el mismo nombre.
Jaime Tejedor, presidente de la Cofradía de Pescadores de Pasaia, recuerda 25 años después, que fue la última persona que habló con José Carreira. Su «explicación más lógica» es que todo induce a pensar que el pesquero fue embestido por un gran buque que navegaba con piloto automático y se hundió en alta mar. Siempre ha sostenido que en la zona de la tragedia pasan los grandes mercantes del norte de Europa hacia el sur.
«Era un barco de doble estructura, cerrado herméticamente. El más moderno que había», destaca en declaraciones a DV. Opina que la embarcación no hubiera desaparecido si hubiera contado con la tecnología de hoy día. «Ahora se sabe en todo momento dónde se encuentra un barco y qué recorrido está haciendo. Pudo producirse un falló de la radiobaliza», asevera en un intento de explicar lo que pudo ocurrir. También aporta otro dato muy ilustrativo. «El pesquero llevaba 500 cajas de madera para llenarlas de pescado y ninguna de ella fue localizado nunca por otros barcos que navegaban por la zona. La desgracia es que nadie sabe nada de nada tanto tiempo después», concluye con pesar.
Tejedor también subraya que en el momento de la desaparición no había gran oleaje. «Esa zona es una autopista de la mar», mantiene el presidente de la Cofradía de Pescadores de Pasaia. «A algunos el caso les recuerda a las desapariciones de barcos en el Triángulo de las Bermudas. Siempre se habla de eso», señala escéptico.
Otros expertos creen que es fácil que un petrolero o un bulk-carrier colisionase con el 'Carreira'. Además, señalan que al ser un barco que trabajaba en caladero lejanos y siempre solo era fácil que nadie se enterara del accidente y que se fuera al fondo del mar, sin posibilidad de reacción.
El funeral por los diez tripulantes del 'Carreira' tuvo lugar el 1 de marzo de 1996. Al acto, celebrado en la vieja lonja de Pasaia, asistieron unas 3.000 personas. El que no se encontraran los cadáveres complicó la reclamación a los seguros de las pertinentes indemnizaciones y la Diputación de Gipuzkoa, al igual que el Ayuntamiento de Pasaia, prestaron su ayuda a las familias de los marineros fallecidos.
«Si no llega a ocurrir lo del 'Carreira', y el 'Marero', hundido en aguas del Golfo de Vizcaya debido a un fuerte temporal el 20 de diciembre de 1998 con ocho tripulantes a bordo, no se hubieran abonado las indemnizaciones a los familiares», asegura el presidente de la Cofradía de Pescadores de Pasaia. Tejedor fue uno de los artífices de la modificación de la ley sobre desaparecidos tanto en el Congreso como en el Senado. «Ahora, si alguien desaparece en el mar, en la montaña o en un derrumbe el seguro se hacer cargo aunque no se recupere el cadáver. Tiene que haber una muerte para que se produzcan soluciones», lamenta Tejedor, que nunca podrá olvidar lo ocurrido 25 años atrás.
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