El nuevo peaje de la N-1 arranca el día 14 con cambios para salvar las objeciones judiciales

El departamento de Infraestructuras Viarias se encuentra ultimando estos días todas las conexiones de los dos arcos nuevos que completarán las instalaciones ya existentes y que deben entrar en conexión con ellas para proceder al cobro correcto de los camiones que circulen tanto por la N-I como por la A-15. «Estamos concluyendo las pruebas de integración de software para asegurarnos de que todo funciona correctamente», apuntan. Las cámaras y el cableado necesario para controlar las matrículas de los vehículos pesados que pasen bajo cada arco ya están activadas tanto en el nuevo pórtico de Astigarraga como en el de pequeño tamaño colocado en la salida de Andoain y que gravará el tramo más corto del nuevo sistema, que apenas alcanzará los 2,2 kilómetros.

A partir del martes el sistema se modifica prácticamente en un 75%. El actual sistema, con el que se obtuvo una recaudación de 10,8 millones (sin IVA) el pasado año, consta de tres arcos colocados en Etzegarate, Andoain e Irun (este último grava el tramo Andoain-Astigarraga). Cobra tres tramos: Astigarraga-Andoain (10,3 kilómetros), Andoain-Andoain (2,2 kilómetros) e Idiazabal-Etzegarate (7,4 kilómetros). En proporción, se paga entre 0,56 euros (a vehículos entre 3,5 y 12 toneladas) y 0,69 euros (a trailers de más de 12 toneladas) cada paso por el arco intermedio de Andoain, pero el precio se eleva a 5,56 euros -6,89 a los de mayor tonelaje- a los transportistas que realizan el trayecto entre Astigarraga y Etzegarate.

Este sistema fue recurrido ante la justicia por el Comité Nacional de Transporte por Carretera y el TSJPV lo anuló el 9 de abril del pasado año, al considerarlo «discriminatorio» para los que llegan de fuera del territorio, ya que la mayoría de transportistas guipuzcoanos solo pasaban por el arco intermedio con lo que deben pagar una factura menor y el grueso del desembolso lo asumen los camioneros foráneos. De hecho, los mayores beneficiados con la actualización del AT serán los camioneros que crucen de un extremo a otro el territorio por la N-I y la A-15, que verán reducida su factura entre 1,3 y 1,5 euros por trayecto.

Con el nuevo sistema, que fue aprobado en Juntas en octubre del pasado año, el último tramo (Idiazabal-Etzegarate) se quedará como está, pero los otros dos sufrirán variaciones. El nuevo pórtico de la A-15 en Astigarraga gravará un nuevo recorrido de 3,19 kilómetros (desde el enlace de Zikuñaga de Hernani hasta su final en el enlace con la AP-8 y la GI-41 en Astigarraga). Para los camiones más ligeros, el paso por este tramo costará 0,7 euros y para los más pesados 0,89, y su entrada en funcionamiento conllevará, de forma automática, la desconexión del arco situado ahora en Irun, que podía llevar a confusiones por su ubicación, dado que cobra ahora el tramo Andoain-Astigarraga y no todos los kilómetros hasta la frontera.

El nuevo formato alarga el tramo interno cobrado por el arco de Andoain de 2,2 a 5,37 kilómetros -bien sea hacia Lasarte por la N-I o hacia Urnieta por la A-15- lo que afectará de lleno al bolsillo de los transportistas que hasta ahora solo tuvieran que circular por este trozo de carretera, mayoritariamente, camioneros locales. Por este tramo interno deberán abonar 1,18 euros ó 1,5, según el tonelaje, lo que supone el doble de los 0,56 y 0,69 euros que actualmente cuesta.

La suma de estos tres tramos del recorrido, esto es, lo que representaría cruzar el territorio por la N-I y la A-15 supondrá un desembolso máximo de 4,24 euros y 5,32 respectivamente, según la capacidad del vehículo, lejos de los 5,56 y 6,89 euros que abonan actualmente.

Para cerrar el nuevo proyecto, el nuevo micropórtico instalado en la salida de Andoain cobrará a los que entran ahí una cantidad menor equivalente a un tramo de 2,2 kilómetros.

El nuevo sistema AT recibió el pasado mes el espaldarazo de la Comisión Europea, que confirmó que la norma cumple la directiva continental. El dictamen no podrá ser remitido a Juntas antes de la puesta en marcha del sistema ya que estas se encuentran disueltas y a la espera de los resultados de las elecciones del próximo día 26. Sea como fuere, la Diputación valora el plácet concedido por Bruselas, que permitirá que se siga gravando el paso de los vehículos pesados por las principales vías del territorio, de forma que los ingresos obtenidos por dichas tarifas sirvan después para el mantenimiento de las mismas. Se calcula que se puedan contabilizar más de 30.000 pasos al día de camiones por estos puestos a partir del próximo martes.

Con la puesta en marcha de este sistema renovado, la institución foral espera cerrar cualquier debate en torno a la legalidad del mismo. Sin embargo, para dar carpetazo a la cuestión hay que esperar todavía a los tribunales, ya que mientras la Diputación espera que el Supremo le dé la razón y considere que el primer proyecto no era «discriminatorio», los transportistas estatales también desean que el Superior falle en favor de su recurso sobre la nueva norma.