El medicamento que revolucionó la lucha antitabáquica vuelve a las farmacias guipuzcoanas
Un laboratorio español negocia conSanidad para comercializar una nueva versión genérica del 'Champix', que se retiró de manera indefinida en verano de 2021
La vareniclina, el medicamento que revolucionó la lucha contra el tabaco, está a punto de volver a las farmacias de Gipuzkoa más de dos años ... después de que el producto se retirara de manera indefinida. El laboratorio español Normon está negociando con el Ministerio de Sanidad para volver a comercializar de nuevo el fármaco en una nueva versión genérica del 'Champix' de Pfizer, que se convirtió en un auténtico superventas a comienzos de siglo.
Las previsiones hablan de que el fármaco volverá a las boticas guipuzcoanas a finales de abril o comienzos de mayo como muy tarde, a la espera de que el comité asesor de la Agencia Española de Medicamentos decida su precio y qué porcentaje del tratamiento será financiado por la sanidad pública. La vareniclina comercializada por Normon se dispensará bajo prescripción médica a cualquier adulto fumador que quiera dejarlo. Ahora bien, lo que todavía se desconoce es cómo va a funcionar la financiación de este fármaco, que mantiene en el pacientes unos niveles de dopamina suficientes como para evitar los síntomas de abstinencia.
El medicamento se administra por vía oral en forma de comprimidos y pensado para aliviar los síntomas que causa la abstinencia del tabaco y multiplicar así las posibilidades de que el paciente deje de fumar. El tratamiento, que actúa sobre los sistemas de recompensa que activa el organismo en respuesta a la adicción a la nicotina, tiene una duración de doce semanas que puede extenderse en el tiempo siempre bajo supervisión de un facultativo. Los comprimidos se comercializan en dos formatos –pastilla blanca (0,5 miligramos) y azul (1 miligramo)– y las dosis son progresivas. Por norma general, se empieza a tomar una semana antes de que el paciente deje de fumar.
El nuevo tratamiento llegará al mercado a finales de abril o comienzos de mayo
Según recoge la ficha técnica, las probabilidades de dejar de fumar a las cuatro semanas de empezar a tomar el fármaco se duplican, a los dos meses esta cifra se multiplica por cinco, mientras que si el fumador completa los tres meses multiplica por once las posibilidades de abandonar este hábito de manera exitosa.
Osakidetza comenzó a financiar este medicamento en enero de 2020 y el 'Champix' se convirtió rápidamente en uno de las soluciones más elegidas para dejar de fumar. Tanto que estaba siendo recetado a tres de cada cuatro personas que acudían a consulta y solicitaban ayuda para acabar con su tabaquismo.
Año y medio más tarde, el laboratorio Pfizer informaba de la presencia de la impureza N-nitrosovareniclina en 'Champix', así como de la retirada preventiva de tres lotes, por superar esa impureza los límites establecidos por la compañía. Aunque en un primer momento se indicaba que en septiembre se restablecería el suministro, el fármaco fue retirado de manera indefinida hasta ahora.
La vareniclina no es el único medicamento al que pueden recurrir las personas que quieren dejar de fumar. La lista de tratamientos antitabáquicos financiados por la sanidad pública también incluye el 'Recigarum' y el 'Todacitan', dos fármacos cuyo principal principio activo es la citisina.
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