El Gobierno Vasco cambiará las bases para adjudicar los amarres en todos los puertos vascos
l Ejecutivo autonómico redactará una nueva normativa tras los reveses judiciales en Donostia y Plentzia
El Gobierno Vasco modificará las bases para adjudicar los amarres en todos los puertos vascos. Al laberinto judicial del puerto de Donostia, tras las sentencias del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) que anularon el proceso de reparto de plazas en el Muelle y dejan en el aire la adjudicación de 2021, se ha sumado ahora otro fallo que anula el sorteo que adjudicaba 204 amarres en Plentzia. Estas sentencias tienen su trascendencia más allá de las fronteras de la capital guipuzcoana y de la localidad de Uribe-Kosta, ya que el Ejecutivo autonómico ha prometido que elaborará una nueva normativa para acabar con la conflictividad en el sector. Para ello abrirá un proceso de escucha por los diferentes puertos deportivos de Euskadi. El objetivo es recoger la opinión de los propietarios de las embarcaciones y buscar así una salida consensuada y conjunta a esta crisis.
El Gobierno Vasco espera tener un borrador de una nueva orden que regule la concesión de los amarres en los puertos deportivos vascos para finales de este año. Este documento se redactará en los próximos tres meses tras abrirse un proceso de escucha con los adjudicatarios de plazas, las personas que están en lista de espera y las asociaciones de patrones de Euskadi.
El Departamento de Alimentación, Desarrollo Rural, Agricultura y Pesca, dirigido por la consejera Amaia Barredo, tiende así su mano para acabar con las quejas y la conflictividad que ha agitado este sector en los últimos años. «Queremos escuchar sus propuestas y sugerencias», ha asegurado Barredo. En Gipuzkoa habrá dos grupos de trabajo, y en Bizkaia, uno. Así, el Gobierno Vasco considera que este nuevo proceso de modificación de la orden de amarres no solo dará satisfacción a las demandas sociales, sino también a la resolución de las controversias jurídicas y los aspectos recogidos en las sentencias.
El Departamento está analizando si recurrir la sentencia de Donostia al Tribunal Supremo
proceso de escucha
En la segunda quincena de septiembre se realizará la convocatoria de las diferentes sesiones de escucha que plantea el nuevo proceso participativo, realizando las invitaciones a participar en las mismas y para la confirmación de los grupos de trabajo con amarristas actuales y con solicitantes que están en listas de espera.
En el aire
En el caso de Donostia, hay una sentencia firme del TSJPV y, en estos momentos, en el Departamento que capitanea Barredo se está analizando la conveniencia o no de recurrir en casación al Tribunal Supremo. En marzo de 2021 Euskadiko Kirol Portuak (EKP) inició la convocatoria pública para adjudicar 384 amarres fijos (para un periodo de 15 años) más siete de temporada en el Muelle de Donostia. El TSJPV calificó la segunda adjudicación -la primera fue anulada por la propia EKP- para repartir los amarres del Muelle donostiarra como «contraria a derecho» y, por tanto, todo el proceso quedó en el aire. Aunque esta decisión atañe únicamente a dos de los recursos presentados por solicitantes y usuarios que quedaron fuera del reparto, hay muchos más.
La batalla de Plentzia surgió también hace ahora cuatro años. El Gobierno Vasco estableció un sistema de adjudicación diferente al sorteo puro, un proceder que se venía aplicando desde hacía mucho tiempo en la localidad de Uribe-Kosta. Las bases establecían un complejo sistema de clasificación de los barcos, a partir de sus medidas. Los pliegos de condiciones para el acceso eran muy técnicos y la adjudicación resultó polémica porque hubo patrones que se sintieron excluidos.
El resultado del sorteo fue impugnado por unos 80 amarristas. Una decena de ellos decidieron ir más allá del plano administrativo y abrieron una batalla legal. Este julio, cuatro años después del sorteo, el TSJPV dictaba sentencia y les daba la razón, anulando la concesión de las 204 plazas.
Se crearán grupos de trabajo con adjudicatarios, personas en lista de espera y asociaciones de patrones
El principal argumento que han tenido en cuenta los jueces para tumbar la decisión del Gobierno Vasco es que la Administración realizó una interpretación equivocada de las bases del concurso. «Añadió un requisito definitivo de límites de manga no expresamente establecido en la convocatoria ni fácilmente deducible de la Orden de la consejera (2017) que regulaba el proceso». Esto hizo que la asignación no resultara ajustada a derecho y que no cumpliera su supuesto espíritu de aprovechar al máximo la lámina de agua.