«La gente sí ve que el turismo rural es más seguro, pero las reservas van lentas»
Olatz Manterola regenta el agroturismo Montefrio de Urnieta y aunque se muestra optimista, reconoce que los datos por ahora no le avalan
Los ecos que auguran un buen verano para los alojamientos rurales son por ahora una ilusión. Muy esperanzadora, sí. Pero de momento, de realidad tienen ... poco. Olatz Manterola gestiona el agroturismo Montefrio en Urnieta «en las faldas del Adarra» desde hace once años. Y para cuando ella empezó, su suegra ya llevaba otras once primaveras alojando turistas. El espacio que ofrece con hasta 7 habitaciones en total tiene el rodaje hecho, pero parece que por mucho que ya cuenten con clientes habituales que siempre repiten, este 2020 se les va a atragantar igual.
Arrancaron en marzo como el resto del sector. Con una avalancha de cancelaciones que parecía no tener fin. «Para verano no teníamos todo completo, pero casi», comenta. Cayeron todas las reservas menos una, que se mantuvo para finales de julio.
«Hemos tenido cerrado hasta el 1 de junio y ahora han empezado a entrar algunas llamadas de gente que quiere reservar, pero la mayoría son clientes que ya han venido en otras ocasiones», comenta en referencia a unos catalanes que se hospedarán en sus establecimiento en agosto.
Por ahora los primeros clientes que ha tenido «han venido por tema trabajo», salvo unos que se alojaron el pasado fin de semana «que venían desde Alemania y que iban a Andalucía a ver a unos familiares», comenta.
Su clientela se reparte al 50% entre turista estatal y extranjero, por lo que el fomento del turismo de cercanía le parece una iniciativa «muy buena y muy necesaria». «Además, veo coherente que se fomente el turismo por la zona para limitar que pueda haber un segundo rebrote... La verdad que solo de pensar esa posibilidad me da un poco de miedo», reconoce.
Por su parte, desde luego, ha hecho todo lo que está en sus manos para garantizar que sus huéspedes estén en un espacio seguro. «Cumplimos con los protocolos que nos han dicho y además creo que para alguien que ha pasado el confinamiento encerrado en su casa en una ciudad, el hecho de poder estar en un entorno aislado y en plena naturaleza tiene que ser agradable». En ese sentido, entiende, que «la gente sí puede ver el entorno rural como más seguro».
Evitar aglomeraciones
Los alojamientos rurales ven esperanzados las encuestas que determinan que el turista lo que buscará este verano será huir de las aglomeraciones y de destinos y espacios concurridos. Por eso resulta lógico pensar que los establecimientos situados en entornos rurales o naturales van a ser los grandes 'beneficiados' en este verano tan atípico. «Sí parece que las reservas se empiezan a mover algo, pero en mi caso al menos está siendo muy poco a poco. Todavía hay demasiada incertidumbre».
Por ahora, sin prácticamente reservas a medio plazo, confía en alcanzar un agosto «con días buenos gracias a las reservas de última hora». Pero como dice, «habrá que esperar a ver qué pasa».
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