La Diputación recurre la sentencia del TSJPV que anula la obligatoriedad del multikirola

El escrito fue presentado el martes, aunque la Diputación ha informado de ello este viernes. La fecha límite para recurrir este fallo era el día de ayer. En el texto, la Diputación considera que «la resolución impugnada tiene un impacto mucho más amplio que el caso concreto de la familia denunciante, afectando a miles de escolares, clubes deportivos, centros educativos y administraciones públicas implicadas». Según los datos del curso 2023-2024 que aportan desde la Diputación Foral, de los 17.500 escolares inscritos en Multikirola, cerca de 11.000 se verían afectados por este fallo.

Desde el área que gobierna Goizane Álvarez se reafirman en que «existe un compromiso para seguir cumpliendo con lo que dicta la Ley vasca del Deporte», esto es, «que Multikirola sea un programa polideportivo, que evite la especialización temprana, así como la explotación precoz del talento; que sea respetuoso con el desarrollo madurativo de los menores, y que asiente bases sólidas de hábito para la práctica físico-deportiva a largo plazo; además de favorecer la coordinación, la prevención de lesiones por sobrecarga y el descubrimiento de nuevos intereses y habilidades», ha señalado la diputada de Deportes, Goizane Álvarez.

La exigencia de la alternancia entre el programa foral de deporte escolar y competir en un club es un requisito que, a nivel de Euskadi, solo se da en Gipuzkoa. En los otros dos territorios históricos, Bizkaia y Araba, la interpretación de la ley vasca del Deporte es diferente y la normativa se aplica de tal modo que, por ejemplo, un niño de 10 años (5º de Primaria) pueda jugar en un club de baloncesto sin tener que estar también inscrito en el equipo del colegio. La existencia de estos diferentes modelos en el seno del País Vasco ha solido generar debate social de forma recurrente, aunque no ha sido hasta ahora cuando una familia guipuzcoana decidió judicializar el asunto, hasta el punto que el TSJPV les ha dado la razón.

En este sentido, prosigue Álvarez, «se trata de un modelo alineado con los principios de la Ley vasca del Deporte de 2023, que promueve la práctica de deportes minoritarios, garantizando un ecosistema diverso y ampliando las opciones de cada niño, a quienes enseña competencias para la vida desde el juego y la diversión, y no desde el resultado, la competición o el talento«. Es, para el organismo público, »un modelo solidario, integrador y que tiene a los colegios en el centro, por ser espacios accesibles para todos, y libres de presión y estrés competitivo».

La Diputación Foral de Gipuzkoa reitera que su compromiso con la mejora del deporte escolar «es firme» y, además, confía en que «la justicia clarifique esta cuestión para asegurar la estabilidad y la continuidad del programa de deporte escolar en Gipuzkoa».