Un centenar de personas se ha cambiado de sexo en Gipuzkoa desde el inicio de la 'Ley Trans'
De las 508 solicitantes que han ido al registro civil en Euskadi, casi el 20% anula el proceso tras el primer mes
Cada día más de una persona viene acudiendo a un registro civil con la intención de cambiarse de sexo en Euskadi. Desde la entrada en ... vigor de la 'Ley Trans', el 2 de marzo de 2023, que permite la autodeterminación sexual sin necesidad de aportar ningún informe médico o psicológico relativo a la disconformidad con el sexo que le fue consignado al nacer, ni someterse a un procedimiento médico o quirúrgico, se han abierto 587 expedientes, de los que ya se han ejecutado 508. De ellos, el 80% (408) han cristalizado en una modificación definitiva del sexo. Sin embargo, casi dos de cada diez (93) han sido cancelados de manera voluntaria durante el proceso administrativo. Y siete (1,38%) han sido rechazados por la autoridad judicial.
La Ley 4/2023, de 28 de febrero, para la igualdad real y efectiva de las personas trans y para la garantía de los derechos de las personas LGTBI, popularmente conocida como 'Ley Trans', simplifica enormemente el proceso del cambio de sexo, con el fin de reducir las situaciones de discriminación que sufre este colectivo. Así, con solo presentarse en un registro civil, las personas mayores de 16 años pueden cambiar su sexo. En el caso de tener entre 14 y 16 años, deben presentar la solicitud bajo la asistencia de sus representantes legales. Y entre los 12 y 14 años, se requiere autorización judicial.
De las 508 personas que han completado el cambio, 115 lo han hecho en Gipuzkoa: 59 en Donostia, 16 en Bergara, 15 en Irun, 11 en Tolosa, 10 en Eibar y 4 en Azpeitia. En Bizkaia lo han formalizado 301 y en Álava 92, según datos facilitados por el Departamento de Justicia y Derechos Humanos del Gobierno Vasco. En Gipuzkoa hay un 25,8% de expedientes que siguen abiertos (40, de ellos 24 en Donostia), en Bizkaia el porcentaje baja al 10,4% (35) y en Álava, al 4,16% (4).
Tras el cambio legal, un total de 235 expedientes se tramitaron en 2023, y 273 en lo que va de año, hasta el 30 de agosto. Entre enero y febrero se dieron 105 casos, y luego ya entre 31 y 34 cada mes salvo en julio (22) y agosto (13).
Hay que precisar que el expediente se inicia cuando la persona interesada acude al registro civil y completa la solicitud ante un letrado de administración de justicia (LAJ), quien le debe explicar todas las implicaciones legales y administrativas que conlleva un cambio en el registro. Al mes, en una segunda cita, la petición de cambio debe ser ratificada para que la inscripción en el registro pase a ser definitiva, normalmente en un plazo de dos o tres días.
En ese mes de gracia, casi dos de cada diez solicitantes (93 de 508) se echa para atrás en su intención de cambiarse de sexo. Hay que tener en cuenta que la modificación en el registro tiene una serie de consecuencias. Entre ellas, actualizar ante un notario los datos en todos los títulos de propiedad, lo que implica también un desembolso económico. Según fuentes consultadas, este hecho podría justificar bastantes de las renuncias , ya que se desiste más según se tiene más edad.
Menores de 12 años
De los 508 expedientes finalizados, siete se han resuelto negativamente. Suele suceder que, en ocasiones, el LAJ que atiende la solicitud sospeche que el demandante no se halla en plenitud de sus facultades mentales, por lo que en ese caso se exige un examen forense que resulta excluyente.
Según se detalla en la memoria de la Fiscalía de la Comunidad Autónoma del País Vasco, también se han dado al menos dos peticiones de menores que contaban con 11 años y escasos meses. Es decir, no habían cumplido los 12 años, la edad mínima para acceder al cambio de sexo, en este caso con autoridad judicial. La Fiscalía de Bizkaia inadmitió ambos expedientes, que fueron recurridos ante la Audiencia Provincial.
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