Los guipuzcoanos vuelven a llenar las baldas del Banco de Alimentos
La organización celebra la «buena acogida» de la última campaña y recauda un 37% más que el año pasado
Las cajas, bolsas y cestones de comida de la recogida de primavera celebrada este pasado viernes y sábado ya están llegando a los almacenes del ... Banco de Alimentos de Gipuzkoa. Ahora comienza una nueva tarea: la de clasificar, ordenar y colocar los más de 80.000 kilos físicos de comida conseguidos en la última campaña, en la que se recaudó casi un 40% más el año anterior.
«Estamos muy contentos. Ha sido un éxito y hemos conseguido el objetivo de llenar las baldas del almacén, al menos hasta noviembre, cuando se celebra la Gran Acogida», apunta Carlos Martínez, vicepresidente del Banco de Alimentos de Gipuzkoa. Además, gracias a la respuesta «muy positiva» de la ciudadanía, también han alcanzado una segunda meta. «Hay muchos productos que, con la inflación, se han encarecido hasta un 30%», aseguraban antes de la cita. Con esta última convocatoria, la institución ha hecho acopio de algo más de 82.000 kilos en la recogida física, un 37% más que el curso anterior (60.000 kilos de comida).
A los buenos datos obtenidos falta por sumar lo acumulado con los bonos solidarios. «Todavía nos tienen que decir los supermercados de Uvesco (BM y Super Amara) y Eroski cuánto se ha donado, pero nos han avisado de que muchas personas han preguntado por ellos», reconoció. Un hecho que les anima a ser optimistas. «El año pasado, entre kilos recogidos y bonos, conseguimos 180.000 kilos de alimentos. Viendo los datos de este curso podríamos alcanzar los 230.000». En la recogida de primavera, la aportación en bonos suele corresponder a un tercio del total donado.
82.000
kilos de comida ha recaudado el Banco de Alimentos en la última campaña de primavera. Estas cifras mejoran en un 37% a las obtenidas en la misma cita del año anterior, cuando se obtuvieron 60.000 kilos en la recogida física.
Gipuzkoa acudió en masa a los más de 54 supermercados de Eroski, BM y Super Amara para apoyar la causa. Allí les esperaban más de 600 voluntarios y, además de la alta cantidad de donaciones, destacan «que han donado lo que hacía falta». «Este año, en el paquete de ayuda europea, no enviaban aceite, uno de los productos que más se ha encarecido como consecuencia de la inflación. Estamos viendo que la gente ha donado bastante y nos hacía mucha falta». Además, destacan que se ha entregado «mucho producto infantil y todo tipo de conservas».
«Tenemos que dar las gracias»
Con la buena respuesta ciudadana, el Banco de Alimentos puede volver a respirar tranquilo. Los almacenes dejarán de estar bajo mínimos y las más de 24.000 personas a las que atienden podrán seguir contando con un plato de comida sobre la mesas. «Solo podemos dar las gracias. Siempre que lo necesitamos, Gipuzkoa responde. Estamos muy agradecidos», reconoce Martínez.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión