
«Al analizar una escena, no podemos fallar»
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Unai Lejarza y Oscar García, miembros de la Policía Científica, aseguran que «el ADN nos da muchas posibilidades de resolver un delito»Impacta llegar a la escena de un crimen. Pero los expertos son conscientes de la importancia de mantener la calma. Su trabajo es tan difícil ... como apasionante y deben hacerlo bien. «No podemos equivocarnos. Tenemos un protocolo de 10 pasos que es fundamental», asegura Unai Lejarza, director técnico de Calidad de Lofoscopia e Inspecciones Oculares de la Ertzaintza. «Lo primero que hacemos es recoger la información básica y reconocer bien la zona», subraya. A partir de ahí, establecen el plan de actuación y fijan con mapas, fotos o vídeos el lugar de los hechos.
El siguiente paso es buscar evidencias. Algunas son fáciles, como un arma, un móvil o sangre. Otras, sin embargo, más complicadas, como las huellas o restos invisibles que hay que tratar. Una vez fijadas con sumo cuidado todas las evidencias, las levantan y embalan para que nada se contamine y comienzan a tratar la escena. Es ahí cuando se inician las hipótesis: «Por dónde entró el presunto agresor, cómo se produjo el suceso o qué urge que se analice en el laboratorio, entre otras cosas», reconoce Lejarza.
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El objetivo final, elaborar un escrito meticuloso que sea el acta de esa primera inspección ocular. Este es su decálogo. Más importante que los mandamientos. «El mayor error es no seguir el protocolo», explica este ertzaina. Por su parte, Oscar García, personal laboral de la sección de genética forense de la unidad de la Policía Científica, se encarga de analizar en el laboratorio los restos hallados. Como experto en genética, su labor se centra en determinar el ADN. «Me refiero al análisis que hacemos de manchas de sangre o semen, de saliva en colillas o de células de la piel que han podido quedar simplemente al abrir una puerta o tocar una superficie», indica García.
Con ello, tratan de sacar un perfil genético de ADN que les permite decir si esa persona ha tocado esa puerta o exonerar a quien no lo ha hecho. «Es un avance con respecto al estudio de huellas dactilares». Este estudio de los genes se ha extendido al análisis generalizado de ADN en violaciones, homicidios o identificación de cadáveres. «Y, a menudo, es lo que nos da una vía segura de investigación para relacionar a una persona con el delito o desecharla».
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