Iñaki Urdangarín y Martínez-Almeida, conexión sorpresa por el hijo recién nacido del alcalde

El nacimiento del primer hijo del alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, y su mujer, Teresa Urquijo, este miércoles por la noche ha provocado una conexión sorpresa entre el edil madrileño e Iñaki Urdangarín, residente desde el pasado año en Vitoria y que este último fin de semana disfrutó de una jornada de playa en La Concha junto a su actual pareja Ainhoa Armentia.

Y es que, el bebé, al que le han puesto el nombre de Lucas, en homenaje al abuelo materno, tendrá como padrinos a Juan Urquijo, hermano de la flamante madre y pareja sentimental de Irene Urdangarín, y a una sobrina del regidor.

Aunque el nacimiento estaba previsto para el 24 de junio, fue finalmente este miércoles cuando Teresa Urquijo dio a luz a su pequeño en el Hospital Universitario Nuestra Señora del Rosario, situado en el distinguido barrio de Salamanca, en Madrid.

Pocas horas antes del ingreso hospitalario de Teresa, el alcalde de Madrid participaba en su último acto público antes de convertirse en padre. Allí, aseguró que su esposa se encontraba «muy serena, todo marcha bien». «Seguiré trabajando hasta el último momento, porque es lo que debo hacer. Los madrileños esperan de mí que asuma mi responsabilidad, tome el permiso por paternidad cuando llegue el momento, pero mientras tanto, seguiré cumpliendo con mi labor», declaró ese mismo miércoles por la mañana.

La pareja contrajo matrimonio en abril de 2024, en una ceremonia que acaparó la atención mediática tanto por el perfil del alcalde como por la ascendencia de la novia. Teresa es nieta de la princesa Teresa de Borbón-Dos Sicilias, prima del rey emérito, con quien mantiene una relación cercana. Contra todo pronóstico, el propio don Juan Carlos asistió a la ceremonia religiosa en la Iglesia de San Francisco de Borja, acompañado de otras figuras destacadas como la infanta Cristina y su hijo Juan Valentín, así como la infanta Elena, quien acudió con sus hijos Froilán y Victoria Federica.

El banquete nupcial se celebró en la finca 'El Canto de la Cruz', ubicada en Colmenar Viejo, propiedad de los abuelos maternos de Teresa. Allí, doña Sofía se reunió directamente con los invitados, quienes pudieron disfrutar de una cuidada selección gastronómica preparada por el renombrado restaurante Lhardy.

Tras la ceremonia, los recién casados emprendieron su viaje de luna de miel a dos destinos de ensueño: las Islas Maldivas y Bután, conocido como el «reino de la felicidad». A su regreso, comenzaron a recibir los regalos que los asistentes a la boda habían elegido de una variada lista, que incluía desde un juego de posavasos de 14 euros hasta una alfombra afgana valorada en más de 7.000, pasando por una vajilla de la Cartuja de Sevilla de más de 1.100 euros.

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