«La recuperación va a ser dolorosa y aún veremos situaciones complicadas»
La consejera afirma que si las cifras de la pandemia empeoran se podría restringir la movilidad en Euskadi sin un segundo confinamiento
-Vemos a diario cierres, despidos… ¿Hemos tocado ya suelo o nos queda por sufrir?
-Confío en que hayamos tocado suelo, pero todo depende de la situación sanitaria. No nos podemos permitir un segundo confinamiento, aunque la recuperación va a ser dolorosa y veremos todavía situaciones complicadas. Vamos a tener que acompañar a las empresas.
-Adegi sitúa la recuperación en 2021 y ustedes en 2022…
-(Sonríe) ¡Que se cumpla lo que dice Adegi! ¡Ojalá! Sector a sector la situación es muy diferente. La electricidad, la electrónica o las TICs cumplen sus expectativas, mientras la máquina-herramienta está sufriendo y el 'Oil & Gas', ni te quiero contar. La aeronáutica también está regular. Pero lo 'Bio', por ejemplo, va fenomenal, y en eso Gipuzkoa está muy bien…
-¿Qué va a pasar cuando los ERTE se transformen en ERE o haya que empezar a pagar los Elkargis y los ICOs?
-Si en abril la situación no ha mejorado, quizá nos tengamos que plantear dar un año más de carencia a esos créditos. No vamos a ahogar a la industria por no hacerlo.
-¿Las empresas que cierran plantas han de devolver las ayudas públicas?
-Depende de para qué las recibieron. Muchos de nuestros programas ya incluyen condicionalidades, bien por deslocalización o porque no se ha generado el empleo prometido. Ahora bien, si eran para I+D y los proyectos se han hecho es difícil exigir la devolución.
-¿Prevé un 'otoño caliente'?
-Ya lo estamos viendo. Que los sindicatos en Osakidetza planteen una huelga de tres días con la situación que se está viviendo... No es comprensible.
-Vemos datos de contagios por Covid-19 muy malos en muchos puntos de Euskadi, pero el Gobierno Vasco se resiste a tomar medidas drásticas. ¿Por qué?
-El LABI ha propuesto nuevas medidas que entrarán en vigor cuando se publiquen en el BOPV tras la ratificación del TSJPV. Valoraremos en próximos días limitaciones quirúrgicas a la movilidad y de prohibición de actividades en localidades con incidencia alta. El confinamiento absoluto no nos lo planteamos.
-¿Les preocupa Navarra?
-Nos preocupa Navarra en si misma. No planteamos restringir la movilidad entre ambas comunidades. Tienen cifras muy altas en municipios muy pequeños, pero están tomando medidas y no les tiembla el pulso.
-Una senadora del PNV ha anunciado que CAF, participada por el Gobierno Vasco, ha quedado fuera del gran concurso de trenes de Renfe…
-La empresa está trabajando para ver si se puede subsanar el error técnico que pueda haber cometido. Confío en que pueda optar a esos contratos. Al Estado español le interesa, pues está en Beasain, y en Navarra y en Aragón. Lo que me consta es que CAF va a trabajar siempre por mantener el empleo aquí.
-Hay muchas empresas vascas cansadas e infinita cantidad de dinero en manos de fondos. ¿Le da miedo?
-Ya pasó en la anterior crisis. Ahora lo que vemos es acercamientos y posibles movimientos, también en la empresa familiar. Hay que estar atentos porque también hay dinero en Euskadi y ganas de invertir.
-Se ha firmado esta semana el Convenio del Metal de Gipuzkoa. ¿Estamos en un nuevo tiempo de entendimiento?
-Después de tantos años, es una excelente noticia. Sobre todo porque cuando Adegi empezó a trabajar la Nueva Cultura de Empresa se le acusó de que lo hacía para no firmar convenios. Esto prueba que la negociación colectiva puede convivir con esa cultura de transparencia.
-¿Asistimos a una nueva cultura también en ELA?
-¡Ojalá! Ojalá sea el primero de muchos convenios que se puedan firmar en Euskadi.
-El puerto de Pasaia tiene nuevo presidente. ¿Qué podemos esperar de esta etapa?
-Pasaia es una infraestructura crucial para Gipuzkoa; el plan estratégico seguirá vigente y el nuevo presidente asume la responsabilidad conocedor del impulso industrial que merece el puerto