Escrivá agradece en San Sebastián el trabajo de la TGSS durante la pandemia
El ministro clausura una convención de la Tesorería de la Seguridad Social y resalta el papel de ésta en la gestión de los ERTE
El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, ha agradecido este jueves en San Sebastián la labor de la Tesorería General de la Seguridad Social durante la pandemia. Escrivá, que ha clausurado una convención de los directores provinciales de la TGSS, ha explicado que el organismo ha tenido un papel fundamental en la gestión y el control de los ERTE.
«Quizá no ha sido muy conocido, pero desde su director general, en lo que se refiere a la negociación con los agentes sociales, a toda su plantilla en el día a día de la plantilla, la Tesorería ha jugado un papel muy importante en los ERTE, que han permitido mantener la renta y sostener el tejido productivo durante la pandemia», ha señalado el ministro, acompañado del delegado del Gobierno en Euskadi, Denis Itxaso.
Cuestionado por si el Gobierno quiere alargar la edad de jubilación para sostener el sistema de pensiones, Escrivá ha tirado de manual, reiterado que no es intención del Ejecutivo ningún cambio en ese sentido, y ha explicado que la edad de jubilación está ya definida y se sitúa hoy en los 66,3 años para ir alargándose progresivamente hasta los 67, según la legislación de 2011.
Escrivá aseguró que esos límites «son más que suficientes» y que el Gobierno «no piensa modificarlos». A lo que añadió que con la normativa «que entró en vigor en enero», en alusión a la reforma parcial de la Reforma Laboral, «lo que ha hecho es incentivar la jubilación voluntaria más allá de la edad legal y que el ahorro para el sistema pueda beneficiar a esa persona». «La sostenibilidad del sistema se refuerza porque la edad efectiva de jubilación se acerca a la legal», concluyó.
Al hilo del proyecto de ley de la nueva Ley del Aborto, que el Gobierno quiere llevar al consejo de ministros del próximo martes, y en concreto sobre la inclusión en la norma de bajas de tres días para aquellas mujeres que sufran menstruaciones dolorosas o incapacitantes, Escrivá apuntó que en el seno del Ejecutivo se trabaja para encontrar «un equilibrio» entre «reforzar la protección de la mujer y su plena participación en el mercado laboral».
