«Estoy encantada, es el mejor trabajo que podría desear»

– Enhorabuena.

– Estoy muy contenta. Ya lo estaba tras ser quinta en el US Open, donde no obstante me qudó un sabor un poco agridulce porque me quedé a las puertas de la semifinal. Feliz tras lo de ayer.

– ¿Qué objetivos se pone ahora?

– El principal es surfear de forma competitiva para ir a las olimpiadas, clasificarme al CT y seguir en el CS. Eso es con lo que soñamos todos los surfistas.

– ¿Cómo es estar la mayoría del año viajando?

– Yo estoy encantada, es el mejor trabajo que podría desear. Es verdad que es duro y me da un poco de pena porque no acabas de conocer bien cada lugar. Estás allí dos semanas como mucho y te pasas el tiempo entrenando. No obstante, si te organizas puedes conocer sitios y gente increíble.

– ¿Su familia cómo lo lleva?

– Muy bien. He tenido mucha suerte con mis aitas, siempre me han apoyado y me han dejado priorizar el surf. Es cierto que he perdido el contacto con algunos amigos porque estoy casi once meses al año fuera de casa, pero los amigos de verdad siempre están conmigo y me cuidan.

– ¿Cómo puede permitirse ir a los campeonatos?

– Con los premios de los campeonatos puedo cubrir casi todos los gastos. Pero ayudaría mucho tener un patrocinador principal. Además, ahora que el surf es olímpico, hay más becas para ayudar a los deportistas.

– ¿Se puede vivir del surf a su nivel?

– Si encuentras un patrocinio que de verdad apueste por ti, sí. Optar a conseguirlo depende mucho de dónde seas. La gente de California y Australia, que es donde más surf se vende, tienen mejores patrocinios y ayudas. En Europa y África hay menos marcas interesadas en patrocinar.

– ¿Cree que con el tiempo ese interés se igualará?

– Pienso que cada vez se ve mucho más surf en España y en Europa, pero que todavía queda mucho tiempo. En Australia los campeonatos los echan en la tele como si fuese fútbol, en Brasil y EE.UU. también. Ahí está la diferencia. Aquí para poder ver un campeonato tienes que buscarlo en internet.

– En Gipuzkoa, ¿hay interés?

– En Euskadi en general es donde más surf hay y donde más se enseña. Hay mucha cantera. Hace poco fuimos al Mundial y de seis españoles, éramos cinco vascos. Además, la Federación Vasca organiza muchos campeonatos para los pequeños. Los niños también tienen bastantes referentes vascos que han llegado muy lejos y eso ayuda.

– ¿Cuándo empezó a surfear?

– Desde que tengo recuerdos ya surfeaba, a los tres años me metieron en el mar. Al principio era algo que hacía por diversión. Quedaba con mis amigos o iba con mis aitas y mi hermana. Empecé con los campeonatos locales con 10 años, me gustaba mucho competir. Más tarde entré en los circuitos de Gipuzkoa y a los 15 años quedé quinta en el ranking europeo.

– ¿Se quería dedicar a ello?

– Sí. Lo sabía desde pequeña. Cuando veía los campeonatos aquí en Zarautz siempre decía que quería estar ahí y competir con ellos. Al acabar bachillerato decidí cogerme un año sabático y perseguir mi sueño. Justo esa temporada gané el título europeo júnior dos veces, le di una oportunidad y hasta hoy.

– ¿Qué le queda por mejorar?

– Estoy trabajando en saber cómo llevar las derrotas en competición. Antes me afectaban mucho más y no disfrutaba del proceso de frustración, de perder y aprender de los errores. El surf es un deporte en el que vas a perder en el 90% de las veces. Al final solo gana uno y es muy difícil lograrlo. También saber apreciar más las pequeñas cosas cuando estoy en casa porque al principio cuando empecé a viajar solo tenía ganas de salir de Zarautz. Siempre he dicho que nunca quería vivir aquí y ahora es todo lo contrario. Solo pienso en volver para estar en casa y apreciar toda la suerte que tengo, disfrutar de la familia y de los amigos.