Julen Aginagalde ya tiene por fin la medalla que le faltaba
El irundarra se lesionó en el minuto diecisiete del partido por el bronce pero antes ya había marcado dos goles y pudo celebrar el éxito con sus compañeros
iñigo aristizabal
Irun
Domingo, 8 de agosto 2021, 07:47
Cuando alguien ha ganado tantos campeonatos y medallas, con clubes y con la selección, galardones individuales del más alto rango... parece que podría estar saciado ... de éxito, pero no es el caso de Julen Aginagalde, cuyo gen competitivo le ha llevado hasta los Juegos Olímpicos de Tokio contra viento y marea y volverá de ellos con la medalla de bronce.
Un podio olímpico era lo único que faltaba en el enorme palmarés del irundarra, que con clubes ha ganado una Champions League, ligas, copas y otros torneos, y con la selección española, oro y bronce en Mundiales y dos oros, una plata y un bronce en Europeos, a lo que ahora suma el bronce de los juegos de la pandemia. Se añade a Josu Olalla, Aitor Etxaburu y Jordi Núñez como jugadores del CD Bidasoa que ganaron medalla olímpica mientras pertenecían al club, en Atlanta'96. El primero además repitió bronce en Sydney'2000.
Camino complicado
Desde que acabó el partido contra Egipto y hasta que se pase el subidón –que tardará días–, todo parece ideal tanto en la selección como en el mismo Aginagalde, pero ni para el equipo ni para el irundarra el camino hacia el bronce ha sido sencillo.
A nivel de grupo, España llegaba con las bajas por lesión de Aitor Ariño, Dani Dujshebaev, en vísperas de acudir a Tokio se cayó de la lista Joan Cañellas y con la competición ya en marcha se lesionó Viran Morros, que no pudo volver a jugar.
En el caso de Aginagalde, los problemas de espalda han sido su caballo de batalla en esta temporada en la que había vuelto al Bidasoa Irun, a su casa, tras su exitoso periplo en las ligas Asobal y de Polonia. El pivote jugó muchos partidos de la primera vuelta con dolor y no llegaba a su nivel habitual.
Tras ser durante muchos años un fijo de la selección, el irundarra se quedó fuera del equipo para el Mundial que se celebró el pasado mes de enero en Egipto. No fue una buena noticia y dejaba en incertidumbre su presencia en los Juegos Olímpicos.
El parón navideño-mundialista y el trabajo de los fisios ayudó a Aginagalde a ir dejando atrás los problemas físicos y a recuperar su mejor juego. Así en junio llegó la llamada de Jordi Ribera para el grupo que iba a preparar el regreso de España a la escena olímpica tras la dolorosa ausencia de Río de Janeiro'2016.
Entró en el equipo
Estar entre los veinte no garantizaba estar en los Juegos, algo reservado para quince hombres –más Valero Rivera, que ha estado de reserva fuera de la villa olímpica–. Pocos días antes de coger el avión fue cuando Julen supo que iría a su segunda olimpiada.
Pero todavía quedaba más drama que añadir a la participación del bidasotarra, que quedó fuera de la convocatoria en los tres primeros partidos. De los cinco últimos ha participado en cuatro, aportando nueve goles de diez lanzamientos.
Ayer marcó dos, a pases de Raúl Entrerríos y Alex Dujshebaev, pero en el minuto 17 el egipcio Elmasry cayó sobre su tobillo izquierdo y le dejó fuera de combate. Aunque no volvió a jugar en el resto del partido, siguió animando desde el banquillo y pudo unirse a las celebraciones de la medalla de bronce, con la que engorda su palmarés.
Debutó con la selección en 2006, ha disputado 205 partidos –el decimotercero que más– y ha marcado 504 goles. Y ahora redondea su trayectoria con la medalla que le faltaba. Aunque él no ha declarado que vaya a dejar la selección, sí que se ha referido al encuentro de ayer como su último partido, por lo que parece que no volverá a ser internacional.
Cuatro equipos y España
A lo largo de su carrera, además de en la selección española, Julen ha jugado en cuatro equipos. Se formó en el Bidasoa, al que volvió el pasado verano tras catorce temporadas fuera de casa.
Su primer destino fue el Ademar León y recaló después en el Ciudad Real, que se transformó en Atlético de Madrid. Tras siete campañas en la Liga Asobal, marchó a Polonia para otras siete en el Kielce, donde llegó a ganar la Champions League.
Además de los títulos con clubes y selección, fue elegido mejor jugador de la Liga Asobal las temporadas 2010, 2012 y 2013 y mejor pivote del Mundial 2013, Champions League 2013 y 2019, Europeo 2014 y 2016 y Juegos Olímpicos 2012.
«Nos levantamos de la semifinal y estamos muy contentos»
Julen Aginagalde se mostraba «muy contento por esta medalla. Queríamos luchar por el oro pero no pudo ser. A pesar de eso, nos levantamos rápidamente después de la semifinal y es increíble acabar así. Quiero agradecer a toda la gente que me ha ayudado».
El irundarra considera que «hemos hecho un gran campeonato. Es una medalla que nos faltaba a muchos, a esta generación que llevamos muchos años juntos y que además no pudimos ir a los Juegos de Río de Janeiro. Es una alegría enorme. Somos terceros detrás de Francia y Dinamarca, que estos años han estado por delante pero siempre hemos dado guerra».
Respecto a su lesión en el tobillo, señaló que «no sé lo que tengo. He intentado jugar pero no podía. Si no he podido, a saber lo que tengo... Pero eso ahora es lo de menos». Desde el banquillo, «tenía total confianza de que íbamos a sacarlo adelante. Cuando peor estaba mejor hemos jugado». En ese sentido, destacó que «siempre sacamos fuerzas de donde no hay. Se dice que somos viejos pero hemos ganado muchos partidos en minutos finales».
Pese a la larga temporada, «estoy a gusto, fresco, he jugado cuatro de ocho partidos. Me encuentro bien físicamente, aunque ahora con la lesión del tobillo, y con ganas de empezar a entrenar con el Bidasoa Irun». Primero, vacaciones.
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