Copa del Rey, plata olímpica y a seguir soñando
Zubimendi se suma a Oyarzabal y Merino en la columna vertebral de una Real joven, ambiciosa, potente y prometedora
Las de Mikel Oyarzabal, Mikel Merino y Martin Zubimendi son tres historias diferentes que los lazos de la vida ha unido primero en Zubieta y segundo, de forma inesperada, en los pasados Juegos Olímpicos de Tokio. Uno piensa en los grandes torneos del fútbol y son la Champions, la Eurocopa o el Mundial los primeros que vienen a la cabeza. Los aros olímpicos no suelen estar relacionados con este deporte, y más con la normativa actual de no poder ir con la selección absoluta. Sin embargo, una vez en faena, la ferocidad del deportistas no deja escapar un logro tan histórico y reconocido.
Mikel Oyarzabal y Martin Zubimendi han cumplido un sueño de la infancia este año con la Copa ganada en abril en La Cartuja. Mikel Merino hizo lo propio en 2016 haciendo algo grande con Osasuna, como aquel ascenso en el play-off. Sin embargo, ¿habían soñado alguna vez con una medalla olímpica? «Nunca, nunca», responde tajante el navarro. «En los inicios nunca porque generalmente los Juegos Olímpicos no están ligados al fútbol, pero cuando se da la oportunidad y ves la opción, es algo tan novedoso, grande y especial que obviamente comienzas a soñar con ello».
MIKEL OYARZABAL, MIKEL MERINO Y MARTIN ZUBIMENDI MEDALLA DE PLATA EN FÚTBOL
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DNI 24 años, de Eibar.
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Palmarés destacado Campeón de la Copa del Rey con la Real Sociedad (2020) y campeón de Europa sub-21 (2019). 19 internacionalidades con la selección absoluta.
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DNI 25 años, de Pamplona.
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Palmarés destacado Campeón de Copa con el Dortmund (2017) y la Real (2020). Campeón de Europa sub-19 (2015) y sub-21 (2019). Seis internacionalidades absolutas.
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Historial olímpico Medalla de plata en Tokio 2020. Ha disputado cinco partidos en el torneo, con 350 minutos jugados y un gol anotado ante Argentina. Fue el capitán en la final.
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DNI 22 años, de San Sebastián.
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Palmarés destacado Campeón de la Copa del Rey con la Real Sociedad en la temporada 19/20. Una internacionalidad con la selección absoluta.
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Historial olímpico Medalla de plata en Tokio 2020. Ha disputado cinco partidos en el torneo, con un total de 494 minutos. Siempre que ha jugado, ha sido titular.
Oyarzabal admite que tampoco. «Cuando empiezas en el fútbol tan solo piensas en disfrutar y pasarlo bien. Por eso jugaba, porque me gustaba, pero vivir una experiencia de este tipo es positivo».
Merino no pudo jugar la Eurocopa por lesión y ha podido resarcirse con los Juegos, mientras que el incansable Oyarzabal ha completado el doblete. El caso más extremo es el de Martin Zubimendi, que admite que «los Juegos no estaban en mis planes de principio de año. Con la Copa sí sabía que había una final y te vas enfocando en ello, pero lo de los Juegos ha sido progresivo».
Su irrupción en la selección ha sido la misma que tuvo el pasado verano en el tramo final de la Liga con la Real. «Al principio del año tampoco iba con la sub-21, pero después fui al Europeo y ha caído todo rodado». Incluso entrenó con la selección absoluta a pocos días del debut en el torneo continental contra Suecia por los casos positivos que sufrió el cuadro dirigido por Luis Enrique. «Una vez que me llaman para ir a Tokio ya te pones el objetivo de ganarlo y lograr una medalla ya es bastante».
El centrocampista donostiarra le da mucho valor a esa plata. Cómo para no después de que entrara al confinamiento de la pandemia como jugador del Sanse en Segunda B y saliera de ella como un miembro más del primer equipo a las órdenes de Imanol Alguacil. «Es verdad que en los Juegos tampoco se le da demasiada importancia al fútbol», pero Zubimendi aprecia el camino que ha recorrido hasta la medalla. «Es difícil participar porque solo pueden ir los sub-23 y te pasa una vez en la vida. Es complicado que coincidas en esa época, que estés en buena forma y que te llamen. Se ha demostrado que llevábamos un equipazo y entrar ahí también era bastante difícil, por eso yo le doy su importancia».
Buscan el oro con la Real
El último año ha hecho el sprint, pero el suyo es un ejemplo de haber seguido los procesos formativos de Zubieta. Con 22 años se ha convertido en una pieza importante del equipo txuri-urdin, jefe de la medular junto a Mikel Merino y esperanza del actual proyecto que lleva la cara de Oyarzabal en portada. Tan solo se llevan veintidós meses de diferencia, pero el del '10' de la Real es un ejemplo de precocidad.
Debutó con el primer equipo con 18 años y puede haber gente que se haya cansado de verle durante los últimos seis años en la Liga y los dos últimos meses con la selección, pero hay Oyarzabal para rato. Con 24 años está cerca de cumplir 250 partidos con la Real, ha marcado el gol que dio al equipo masculino su primera Copa en 34 años y ha sido importante en las eliminatorias de la Eurocopa.
Merino, salido de otra cantera de tradición como la de Tajonar, se ha asentado en la élite tras explotar en Segunda con Osasuna y probar en el extranjero con el Dortmund y el Newcastle. Cumple su cuarta temporada en San Sebastián y vestido de txuri-urdin ha jugado a un nivel en el que ha sido considerado uno de los centrocampistas de la competición doméstica.
Los tres son fundamentales en un club con hambre de títulos y después de la plata, buscan el oro con la Real.
