'Patria' convierte la Parte Vieja en un plató

Dos centenares de extras, con ropas propias del año 1989 en que se desarrolla la acción, recorrían una y otra vez la calle con sus pancartas para hacer varias tomas, y las actrices Elena Irureta y Ane Gabarain salían de la chocolatería Santa Lucía, sorprendidas por la manifestación. El 'showrunner' y guionista Aitor Gabilondo y el director Félix Viscarret seguían la evolución del trabajo y Karmele Soler era requerida para dar algún toque de maquillaje.

Entre el susto y la extrañeza de quienes se aproximaban por las calles adyacentes sin saber lo que ocurría, «yo creía que esto ya había desaparecido» era el comentario más repetido con sonrisas cómplices y aliviadas, los repartidores aprovechaban los descansos para seguir con su trabajo. A pesar de la aparatosa producción, con el combo de monitorización en un rincón de la plaza de la Constitución y los extras esperando pacientemente junto a las paredes, el rodaje no causó mayor revuelo.

En el interior de la churrería también se desarrollaban diversas escenas de los ocho capítulos que tendrá la serie, cuyo estreno está previsto para el año que viene. «Son escenas de cuando Bittori y Miren aún son muy amigas y no relacionan la fuga a la clandestinidad del hijo de una con las cartas de extorsión que le llegan a la otra», explicaba Aitor Gabilondo, creador y guionista de la serie. «Fernando Aramburu siempre se ha mostrado muy respetuoso y me dijo que él no quería involucrarse en nada, que hiciera mi trabajo, que él ya había hecho el suyo».

El de la novela y el de la serie son «dos lenguajes distintos», y el creador de la segunda considera muy importante reproducir «muy bien la dureza y la intensidad de los años de los que habla, para que no parezca de mentirijillas». Se lo repite continuamente al equipo: «Tiene que transmitir verdad. Porque esos años nos marcaron mucho a todos, a cada uno desde su posición. La crudeza de la fotografía, y el estilo vivo y vibrante que estamos utilizando creo que recrea bien aquella época». No ha querido limar nada: «Hay atentados y torturas, violentos y duros, hay miedo, angustia, desconcierto, recelo, todo lo que encontré en la novela, puesto en la pantalla. Y creo que es como debe ser».

Para el director de los cuatro primeros capítulos de 'Patria', Félix Viscarret, que ya adaptó otra novela de Aramburu, 'El trompetista del Utopía', en su película 'Bajo las estrellas', el escritor de 'Patria' «habla con humanidad de la situación, sin dejar por ello de ver las contradicciones, el humor o las partes menos ejemplares que puede tener cualquier ser humano. Eso es muy de agradecer». Y considera que el hecho de que exista una obra como esta «ya es un avance para la sociedad. Como en cualquier proceso terapéutico, siempre que se puede hablar de algo ya estamos un pasito más cerca de la sanación».

En el amplio reparto figura también Mikel Laskurain, el marido de Miren, un hombre «que se mete en un agujero cada vez más profundo, no da el paso para solucionar el conflicto que tiene en su familia», explica el actor. Sus hijos están interpretados por Eneko Sagardoy, «el hermano menor, que está frente a un conflicto político en el que no encuentra su sitio, y que tiene otro conflicto, el de su orientación sexual, y decide marcharse»; Jon Olivares, que hace de Joxe Mari, un chico de acción, con un carisma, que le lleva a meterse en ETA sin saber muy bien a dónde va»; y Loreto Mauleón «es un personaje muy positivo y esperanzador, pero tiene que hacer frente a demasiados problemas, y pese a todo tira para adelante, es muy luchadora», explica la actriz.

En la otra familia, los hijos de Bittori están interpretados por Susana Abaitua y Iñigo Aranbarri. «Es una chica que vive el atentado de su padre y necesita alejarse de su familia porque tiene horror a ser víctima, a que le pongan la marca», explica Abaitua. «En mi caso», apunta Olivares, «el personaje cambia mucho antes y después de los acontecimientos, es un médico acomodado al que se le viene todo encima, se bloquea y se niega el vivir y el sentir».

Eran ya las tres de la tarde y las figurantes seguían esperando su momento de cruzar frente a la chocolatería, con sus peinados y abrigos de los años 80, aunque su aportación quizás no sea finalmente más que una sombra al fondo de algún plano interior. «He cogido el tren a las seis de la mañana en Zumarraga para venir», nos contaba Inmaculada Prieto, apuntada al casting de extras para toda la serie. «Es mi sexta sesión, hay que tener paciencia pero es muy bonito, ves cómo trabajan y ha habido momentos bastante impresionantes. Además charlas con otros y conoces gente». El rodaje continuará con seis semanas más en el País Vasco y terminará en verano en Madrid.

Los sonoros gritos de «Gora ETA militarra» y «Vosotros, fascistas, sois los terroristas» han sorprendido esta mañana a más de uno en el corazón de la Parte Vieja donostiarra. Una manifestación recorría la calle Puerto lanzando consignas similares. La aparición de grandes micrófonos y varias cámaras tranquilizaban a los curiosos. Se trataba del rodaje de la serie de televisión 'Patria', basada en la popular novela de Fernando Aramburu, que desde las diez de la mañana tiene lugar en la calle Puerto de San Sebastián.

Dos centenares de extras, con ropas propias del año 1989 en que se desarrolla la acción de 'Patria', recorrían una y otra vez la calle con sus pancartas y sus consignas para hacer varias tomas, y las actrices Elena Irureta y Ane Gabarain salían de la chocolatería Santa Lucía, sorprendidas por la manifestación. El 'showrunner' y guionista Aitor Gabilondo y el director Félix Viscarret seguían la evolución del trabajo y Karmele Soler era requerida para dar algún toque de maquillaje.

Entre el susto y la extrañeza de quienes se aproximaban por las calles adyacentes sin saber lo que ocurría, «yo creía que esto ya había desaparecido» era el comentario más repetido con sonrisas cómplices y aliviadas, los repartidores aprovechaban los descansos para seguir con su trabajo.