'The Mustang': Caballos salvajes
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El filme francoamericano 'The Mustang' juega con las ansias de libertad y autocontrol con un estilo muy propio de Sundance
El Festival de Sundance y el instituto impulsado por Robert Redford continúan con su labor de descubrimiento de nuevos directores y nuevas producciones independientes en ... lo que se ha convertido ya en un sello de un tipo de cine no tan infalible ni renovador como a veces se cree, pero a menudo estimulante y que mantiene toda una industria alternativa a los grandes estudios de Hollywood. Incluso más allá del cine estadounidense: 'The Mustang' tiene corazón francés pero un acabado, un estilo elegante y sensible, humanista e intimista, muy propio de ese cine independiente norteamericano. 'The Mustang', que pasó por el festival helado el año pasado y originalmente se tituló 'Nevada', se estrena directamente en Movistar+, en su canal Cine, para ofrecer una sencilla historia de reinserción y redención a través de los caballos salvajes que aportan una promesa de libertad y un contacto con la naturaleza al preso protagonista del filme y, como no, al espectador cautivo de estas semanas.
La historia está basada en un programa real aplicado en algunas cárceles mediante el cual los presos pueden cuidar, domar y preparar a caballos salvajes para su posterior subasta. El paralelismo está servido: la actividad ayuda a los presos a dominar sus propios demonios, manejar sus instintos y asumir su tendencia al descontrol. En una de las escenas claves del filme, la psicóloga les pregunta en una reunión cuánto tiempo pasó desde que pensaron en el crimen hasta que lo cometieron: en la mayoría de los casos fue cuestión de segundos.
Daniel Radcliffe vive una enloquecida aventura en 'Guns akimbo' con sus 'manospistolas'
'The Mustang' se detiene en ese drama interior, a través de la complicada relación que el protagonista (un Matthias Schoenaerts contenido y reflexivo) tiene con la hija que le visita, y que es el único hilo de esperanza hacia el futuro. Pero mira al exterior a través de los caballos, de su bella estampa y significado, y especialmente en una salida que lleva el filme casi al terreno del western. Un Bruce Dern como viejo cuidador de caballos resabiado e implacable pone otro toque de humanidad y encanto a un filme sencillo y bienintencionado con el que la actriz francesa Laure de Clermont-Tonerre debuta como directora de largometrajes.
En contraposición absoluta de ese lirismo, se puede acudir a 'Guns Akimbo', la locura de acción y humor negro que inserta el lenguaje del videojuego en un estilo que parece heredado de 'Trainspotting' y de los dibujos animados del Coyote y el Correcaminos en escenarios urbanos que a veces parecen virtuales, con toda intención. Amazon Prime la estrena directamente en su plataforma y es una producción neozelandesa del director de 'Deathgasm', Jason Lei Howden, con un Daniel Radcliffe enloquecido, y no es para menos: después de dedicar media vida a trabajar en pantallas, ya sea diseñando videojuegos o troleando a lo bestia en redes sociales, el chico despierta del ataque de unos villanos con armas atornilladas en sus manos, lo que le provoca unos cuantos problemas; orinar o ponerse los pantalones es casi el menor de ellos. Este 'sobreviviré' es un divertido frenesí para activar la adrenalina como espectador y dejarse emborrachar por el festival de colores, movimientos de cámara imposibles, violencia, sarcasmo y suficiente ingenio para mantener el interés. Aunque alguno pedirá una biodramina.
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