Irun

«Quiero dar voz a las mujeres que llegaron en los 50 y 60 y reconocer todo lo que aportaron»

Altuna, profesora-investigadora de la EHU/UPV y especializada en el análisis de los procesos sociales desde una perspectiva feminista, estuvo acompañada por la delegada de Igualdad, Maite Cortina, en la rueda de prensa celebrada este jueves en la Casa de las Mujeres.

Bajo el título 'Construyendo nuevas vidas, redes y comunidades. Mujeres que migraron a Irun (1950-1970)', Altuna se ha centrarse en un periodo histórico que , según contó, ha recibido «menos atención» que otros, como la Guerra Civil o la Transición.

Tal y como explicó, tampoco hay demasiados análisis de los procesos migratorios de esos años y cuando se ha hecho, «se ha trabajado desde perspectivas relacionadas con la lucha sindical o las grandes corporaciones, y ahí no aparecen las mujeres». Sin embargo, la investigadora piensa que tuvieron un papel fundamental en la construcción de la ciudad y la sociedad.

En la base de la investigación de Altuna estarán los testimonios de las mujeres que llegaron a Irun en la década de los 50 y 60, aunque también utilizará documentación histórica para «dar contexto a las historias».

En cuanto a los objetivos, la lasartearra buscará entender las razones que impulsaron a estas mujeres a abandonar sus regiones (principalemnte Extremadura, Andalucía, Galicia...), analizar qué medidas tomaron para mejorar sus condiciones de vida al llegar, y visibilizar su participación activa en la construcción y mejora de los nuevos barrios, entre otros. «Quiero dar voz a las mujeres que vivieron esos procesos migratorios y reconstruir su historia reconociendo su protagonismo, su capacidad de organizarse y todo lo que aportaron a los cambios sociales y urbanos que vivió Irun», aseguró.

Además de mirar al pasado, Altuna defendió que su trabajo puede «contribuir a entender mejor el presente, abriendo espacios a otras formas de contar lo que pasó, cuestionarnos qué historias se cuentan y cuáles se silencian y ampliar nuestro imaginario colectivo».

Tal y como explicó durante la rueda de prensa, Altuna considera que Irun es «un lugar privilegiado» para investigar este tipo de procesos migratorios desde una perspectiva de género. Además, apuntó que su trabajo podría resultar «especialmente útil» para «construir puentes entre la investigación y la sociedad».

Gracias a la beca Julia Iruretgoyena, irunesa nacida en 1889 que dedicó buena parte de su vida a luchar por los derechos de la educiación de la mujer, Altuna recibirá una ayuda económica de 18.000 euros para elaborar su trabajo en un periodo de dos años.

Con su trabajo, la investigadora señaló que podría «aportar una mirada nueva a un periodo poco explorado de la historia de la ciudad, centrada en las mujeres y en sus aportaciones cotidianas». En el mismo sentido, expresó que los testimonios «permiten conservar parte del patrimonio inmaterial de la ciudad, de un valor incalculable».

Por su parte, la delegada de Igualdad quiso destacar la «perfecta oportunidad» que ofrece esta convocatoria para «conocer de cerca situaciones, vivencias y experiencias de mujeres de la ciudad».