«Hay mucha gente dispuesta a escuchar una música algo más alternativa»

Fue el único artista español incluido en la banda sonora del popularísimo videojuego futbolístico Fifa 21; comparte con Rozalén el tema de cabecera de la serie 'Mercado Central' de TVE; varias de sus canciones superan los 20 millones de reproducciones en Spotify y un concierto tras otro agota entradas tanto en España como en América Latina. Es Carlos Sadness y esta tarde, a las 19.00 horas, visita el Centro Cultural Amaia (tickets a 15 euros en irun.org/entradas).

–Con el éxito que tiene ahora, ¿se sigue sintiendo cómodo con el calificativo de 'indie' de sus inicios?

–Creo que lo que hago es música indie porque, para mí, indie es música que se hace más desde la creatividad que desde el virtuosismo o los cánones y con la independencia que aporta que no esté hecha para cumplir requisitos comerciales.

–¿Se puede llegar a ser indie y 'mainstream'?

–Habrá quien diga que lo que hago no es indie, pero lo que no es, seguro, es 'mainstream'. Hay programadores de radio que me dicen, 'Mira, Carlos, no puedo poner tus temas entre Beret y Lola Índigo. La gente fliparía'. Lo que pasa es que sí hay mucha gente dispuesta a escuchar algo más alternativo, sin necesidad de que sea algo extremadamente experimental. Tampoco mis números son 'mainstream'.

–Pero algunas de sus canciones van desencadenadas en las listas de reproducción...

–Lo bonito de una canción es que no se apague. Se hace mucha música que tiene un lanzamiento sonado, con números excelentes, pero después la canción queda olvidada, porque llegan mil novedades que tienen también números de lanzamiento buenos. Me gusta que una canción sobreviva a su lanzamiento y forme parte de tu catálogo. Es bonito poder tocar canciones de hace cinco o siete años y que funcionen tan bien como las nuevas.

–Las nuevas, las del último disco, 'Tropical Jesus', están teniendo unos números...

–Algunas canciones como 'Isla Morenita' o 'Todo estaba bien' llegaron en un año a cifras que otras anteriores como 'Qué electricidad' alcanzaron en cinco. Pero lo importante es que me veo reflejado en las canciones, feliz con ellas y feliz de que el público las quiera.

–'Tropical Jesus' es un nombre peculiar para un disco.

–Es como me ve la gente que no sabe casi nada de mí. En muchas ciudades que he visitado estos últimos años oía cómo se refería a mí la gente que me veía por la calle. Un día, un locutor colombiano me describió a sus oyentes como un 'Jesús tropical' y, horas antes, en una televisión de ese país, me habían pedido que me recogiera el pelo porque si no parecía demasiado la imagen de Jesús. En todos esos viajes iba haciendo las canciones que luego han ido en este disco, así que decidí llamarlo de la manera en la que la gente me veía por allí.

–Hay un cambio importante en el estilo del nuevo álbum.

–Sentía que quería actualizar un poco el sonido de baterías y guitarras en mis canciones, que la fórmula que había usado ya no me llevaba a sitios nuevos. Me daba miedo ser repetitivo, escucharme antiguo, así que empecé a trabajar en la idea de sonidos que no se supiera claramente qué eran; nuevas texturas donde las guitarras fueran sólo arreglos y la batería no existiera a cambio de meter lo que llamamos 'beats'. Ése es el mayor cambio del disco, la actualización de su sonido, conservando la manera de expresar y entender las canciones.

–No era la primera vez que afrontaba un proceso así.

–Fue la misma sensación que cuando hice el segundo disco intentando encontrar un sonido que fuera mío y a la vez actual. Es entretenido.

–El disco se publicó hace poco más de un año. ¿Cómo ha sido esta gira en pandemia?

–Me he acostumbrado a las restricciones y me lo he pasado bien, pero ha faltado esa energía tan característica en el directo. También hay gente que me ha dicho que estos conciertos los ha saboreado más... No sé, pero yo estoy feliz de volver a ver a la gente bailar, aunque de momento, sólo en agosto en Ciudad de México pudimos hacer un concierto con la gente de pie, aunque fuera separada en grupos. Fue un respiro.

–El de hoy es sentado. ¿Qué se va a encontrar el público?

–La ilusión que nos hace tocar. Para mí es genial ir a una ciudad donde no he estado, una sensación de novedad, de humildad, muy chula. Tengo muchas ganas. Hace poco fui a un concierto como público y pensé que nunca debo olvidar lo genial que es ir a ver música en directo. Así que hay que estar ilusionado cada día.