La Ertzaintza desaloja la Casa Velasco de Irun
Este inmueble, el más antiguo de Belaskoenea, fue okupado hace años después de que los vecinos fueran desalojados por seguridad
Cuatro furgonetas y cuatro coches de la Ertzaintza junto con dos vehículos de la Policía Local de Irun han acudido a primera hora de este martes al edificio del barrio de Belaskoenea conocido como Casa Velasco, el más antiguo del barrio, para desalojar a los okupas que lo vienen usando.
Problemas estructurales que se detectaron al hacer unas reparaciones obligaron a los vecinos a abandonar sus viviendas de este inmueble por seguridad. «De eso hace ya años. Enseguida entraron okupas», ha explicado uno de los vecinos del barrio que han seguido la actuación policial desde una cafetería cercana.
Los problemas que los okupas han generado en el barrio «han ido a más. Este siempre ha sido un barrio tranquilo y últimamente tenemos que ir a buscar a los hijos para que no vengan solos a casa», cuenta otro vecino. «El ayuntamiento tuvo que cortar la fuente que hay entre la casa y el colegio», que se encuentra justo al lado, «porque la usaban para ducharse».
En los últimos tiempos «ha habido robos en los pabellones de enfrente, intentos de robo en coches, amenazas a vecinos... Y muchas broncas, peleas, gritos... La gente estaba asustada. De noche nadie se atrevía a pasar por delante porque ha habido amenazas e intentos de robo».
Agentes de la Ertzaintza han reconocido el edificio durante cerca de dos horas y tras comprobar que no quedaba nadie en el interior se ha procedido a tabicar los accesos al inmueble. «Yo creo que no han detenido a nadie, pero sí he visto alguno que salía por su propio pie», ha comentado uno de los vecinos.
Dificultad de las gestiones
Hace dos semanas, la alcaldesa de Irun, Cristina Laborda, se refirió específicamente a este edificio de Belaskoenea, asegurando que era «plenamente conocedora de la situación que se está viviendo allí». Laborda apuntó entonces que como en los casos de Doman o Larretxipi 4, entre otros, se trataba de un inmueble privado lo que «dificulta las gestiones que el Ayuntamiento pueda realizar al respecto. No obstante, estamos encima del asunto», aseguró, «trabajando para solventar la situación».
