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Una noche atronadora e histórica
Después de tres años había muchas ganas, y la tamborrada no defraudó. Las compañías y más de 200 dantzaris celebraron el reencuentro en un inclusivo desfile
marian gonzález lizarralde
Jueves, 29 de septiembre 2022, 17:04
Los Sanmigeles pasan del tambor a las sokamuturras tras la sosita jornada de este jueves, en la que ni el tiempo quiso sumarse a la ... fiesta. Pero la noche de tambores de la víspera de San Miguel no hizo falta paraguas, y la cita fue además de multitudinaria, histórica. Bailaron, por primera vez, tres quintas juntas, la que tocaba (nacidos en 2005) y las dos anteriores (2004 y 2003) que al no celebrarse la tamborrada en 2020 y 2021 no pudieron salir. Además, la compañía de barrileros fue mixta, incorporándose mujeres, siguiendo la estela de la de cocineros o las abanderadas.
Lo cierto es que había ganas de volver a atronar las calles y las distintas compañías celebraron el reencuentro con la fiesta tamborrera acompañados de 220 dantzaris y de numeroso público. Los cocineros llevaron incluso carroza con guiño a la fiesta y también a la inclusión, ya que Iñaki Igartua, que lleva tiempo al frente de la organización, se vistió de sukaldari y demostró que se puede seguir haciendo lo que a uno le gusta estando en una silla de ruedas.
Fue también una noche de estrenos. Iñaki Arregi debutó como tambor mayor, Mikel Gartzia al frente de la compañía de barriles y Mikel Maiztegi, de la cocinera. Aitor Biain, a su vez, vivió su primera tamborrada como director de la Banda de Música.
Mirando al cielo
Hoy en la festividad del patrón, los txistularis y la banda han puesto la nota musical a la lluviosa matinal, mientras los más txikis se han refugiado en los hinchables y actividades del parque infantil instalado en Zubikoa. D
Hoy, la bixamona de San Miguel viene marcada por las primeras sokamuturras, Gaztetxoen Eguna, los ritmos joteros de Voces Navarras, la reivindicación festiva de pensionistas y jubilados, las finales del campeonato local de pelota, el certamen de sopas de ajo o el concierto de Kilima. Un día más habrá que mirar al cielo. El consuelo general es que, tanto en Herri Eguna como en la Bixamon de Rosario, parece que la climatología va a acompañar. La fiesta continúa.
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