Bergara

El asoleo de Santa Marina regresa el día 18 como en los últimos 225 años

Como ha ocurrido en los últimos 225 años este próximo 18 de julio habrá ocasión de apreciar el acontecimiento. Sobre las 19.45 horas, y durante unos minutos, los rayos impactarán sobre el antiguo emplazamiento de la custodia bajo el retablo central,

En el transcurso de la misa se producirá el asoleo, y al día siguiente se desarrollará una visitas guiada para disfrutar del suceso, que sale a la luz por iniciativa de Lanbroa Elkartea e Ilatargi Astronomi Taldea, el grupo comarcal de aficionados a la astronomía.

Olvidado durante más de dos siglos, una fotografía tomada el 18 de julio de 2019 en Santa Marina por Andoni Larrañaga, de Lanbroa, es el detonante de una labor conjunta de investigación y difusión del fenómeno que este año quieren revelar a los bergareses y que quedará perfectamente documentado.

Aquella imagen con la luz sobre un punto y el conocimiento histórico de Larrañaga, «era el enclave anterior del sagrario, trasladado en 1968 por un cambio en la configuración del altar por la adaptación a la modernización que supuso el Concilio Vaticano II en la Iglesia» (ahora se encuentra a la izquierda en un retablo menor , desvelaron el fenómeno intencionado de asoleo.

Como señaló Larrañaga, acompañado en la presentación de Ander Errasti y Valen Moñux, de su asociación cultural, «pusimos el tema en manos de los miembros de Ilatargi Josu González y Gorka Buruaga para buscar la explicación astronómica».

El análisis empírico ha confirmado la repetición anual en hora y fecha, «con base a la información que extrajimos de la fotografía de 2019 aplicamos los datos sobre la herramientas 'Suncalc' que permite ver el recorrido del sol y las fases de la luz, y hemos identificado la dirección del sol que en ese momento alcanza el punto determinado», señaló González,

Con la certeza de que se repetirá el viernes de la próxima semana, en colaboración con la propia parroquia y Laboratorium Museoa, han dado el paso a presentar el asoleo de Santa Marina.

El haz luminoso llegará al templo a través del óculo que se encuentra en la fachada oeste, una ventana que calculan se construyó en la última década del siglo XVIII tras la modificación de esta parte de la iglesia, «es obra del reconocido arquitecto Alejo Miranda, el introductor del neoclasicismo. En compañía del párroco de la época decidieron reproducir el fenómeno que ya era conocido. Nos podemos imaginar que efecto producía entre los fieles congregados el día de la patrona. Se podría vender como una manifestación divina que, probablemente, el sacerdote se encargaría de alabar en el sermón».

Despejado el asoleo de su función religiosa y con una explicación científica, se sigue produciendo con exactitud matemática, «estimamos una duración de unos tres minutos, según los cálculos», apuntó Errasti, «el fenómeno del asoleo tiene que cumplir tres requisitos: que los rayos de sol entren por la ventana circulara con un diámetro interior de 2,40 metros situada a 17,60 metros de altura en la fachada y una inclinación de 18º, que se produzca el día 18, día de Santa Marina, y que ilumine el lugar donde estaba situado el sagrario».

La oportunidad de presenciar el fenómeno llegará el día 18 en misa, y además el día 19 con una variación de segundos en el marco de la visita guiada que se ofrecerá en euskera, castellano e inglés. Miembros de Lanbroa e Ilatargi detallarán el trabajo de investigación que han realizada desde el paso mes de marzo para llegar a confirmar el asoleo.

Una curiosidad patrimonial más para el templo que no quedará limitada a estas exhibiciones, como destacó Moñux. Asume en el grupo la función infografiar con carácter didáctico toda las indagaciones y resultados para que el hallazgo quede perfectamente documentado.

Por su parte, Lanbroa Elkartea ha previsto para septiembre un encuentro de su formato de charlas con cena para explicar el asoleo bergarés.