Zapatero privatiza una parte de AENA y Loterías, rebaja impuestos a pymes y quita la ayuda de 426 euros

El Gobierno aprobará mañana un nuevo paquete de medidas económicas con el que pretende calmar a los mercados y mitigar las dudas sobre la solvencia de España. El presidente José Luis Rodríguez Zapatero aprovechó ayer la sesión de control al Ejecutivo en el Parlamento para anunciar, ante la sorpresa general, el punto y final en febrero de la ayuda de 426 euros para los parados que han agotado su prestación por desempleo, una serie de rebajas fiscales para las pequeñas y medianas empresas (pymes), el fin de la obligatoriedad de pagar la cuota cameral y la privatización parcial de los aeropuertos y loterías del Estado, entre otras iniciativas.

La medida de más impacto social es la supresión de los 426 euros. Una iniciativa establecida en 2009 para paliar las dificultades de los parados una vez agotadas todas sus prestaciones sin haber podido encontrar un empleo nuevo. La ayuda se liquidará el 14 de febrero de 2011. La medida entró en vigor el 14 de agosto de 2009 con una duración prevista de seis meses, pero se ha prorrogado por dos veces ante la debilidad del mercado laboral. Unas 700.000 personas han percibido estas pagas hasta el 30 de septiembre. Hasta ayer, el programa había costado al Estado 1.392,80 millones.

A cambio, el Gobierno intensificará sus esfuerzos para ayudar a la gente a encontrar trabajo. Los servicios públicos de empleo (antiguo Inem) duplicarán la plantilla de orientadores laborales, que pasará de 1.500 a 3.000. Hasta el 31 de diciembre pasado estos orientadores habían atendido a casi 900.000 personas en paro, examinando su perfil, proponiendo programas de formación y señalando las ofertas más adecuadas a cada caso.

El Consejo de Ministros aprobará también la normativa que regulará el funcionamiento de las agencias privadas de colocación. Compañías cuyo negocio reside en la intermediación laboral. Tendrán derecho a cobrar por hacer de intermediarias entre los buscadores de empleo y los empresarios, una función que hasta ahora realizaban gratis los servicios públicos de empleo. Se diferencian de las empresas de trabajo temporal (ETT) en que estas no intermedian propiamente, sino que se dedican a 'alquilar' trabajadores para otras empresas.

Rebajas fiscales

Las medidas que afectan a los impuestos no serán de aplicación directa en Euskadi, donde la soberanía fiscal reside en las diputaciones, que deberán decidir si adaptan o no algunas de las propuestas de Zapatero. Entre ellas, la decisión de ampliar el número de empresas que se podrán acoger al tipo reducido del Impuesto de Sociedades, que en España está en el 25% de los beneficios obtenidos y en Euskadi en el 24% (los tipos generales son del 30% y el 28% respectivamente).

A partir del año entrante, podrán acogerse al tipo reducido las empresas con una base imponible de hasta 300.000 euros, frente al tope de 120.000 que rige hasta ahora. También se ampliará el concepto de empresa de tamaño reducido, que en adelante englobará a aquellas con una facturación de hasta 10 millones de euros, frente a los ocho millones actuales. Zapatero cifró en 40.000 las pymes que se beneficiarán de estas decisiones. El Gobierno dará luz verde asimismo a la generalización de la libertad de amortización en el Impuesto de Sociedades hasta 2015, una facilidad hasta ahora reservada a las pymes y hasta 2012.

También ahorrarán las pymes a través de la cuota cameral, que dejará de ser obligatoria y será voluntaria. El Gobierno estima que las empresas podrían ahorrar así hasta 250 millones, de los que 90 corresponderían a pymes. Esta medida sí afecta a Euskadi. La intención del Ejecutivo es que las Cámaras de Comercio se financien principalmente de los servicios que prestan a empresas.

Con más de cuatro millones de parados, el Gobierno busca impulsar el autoempleo y el emprendimiento, así como promover la conversión de autonómos en pymes. Para ello adelanta lo previsto en la Ley de Economía Sostenible en cuanto a las normas que persiguen la reducción de plazos, costes y obstáculos para crear una empresa, con el objetivo de que se pueda crear una nueva compañía en 24 horas.

Privatizaciones

Para reducir el déficit, Zapatero ha optado por hacer suyas algunas de las tradicionales recetas del PP sobre privatizaciones. Una senda que inicia con Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA), y que no acabará ahí. El gestor de los aeropuertos constituirá antes de marzo una sociedad estatal que integrará todos los bienes y derechos de la actual AENA, entre ellos la gestión del aeropuerto de San Sebastián. Será esa firma la que dé entrada a la iniciativa privada en hasta un 49% de su capital. La parte encargada de la navegación aérea seguirá siempre en manos públicas. Con esta operación el Estado ingresará unos 9.000 millones. Lo que sí se privatizará totalmente será la gestión de las dos 'joyas de la corona': Madrid-Barajas y Barcelona-El Prat. Más adelante llegarán Palma de Mallorca o Málaga. Estos aeropuertos rentables se gestionarán bajo un sistema de concesión puro.

También entrará capital privado en Loterías y Apuestas del Estado, de la que se venderá el 30%. El año pasado, LAE inyectó al Estado 2.919 millones de euros. Esta venta reportará al Estado entre 4.000 y 5.000 millones de euros.