¿Ya quemados por las compras navideñas? Ideas para 'sobrevivir'
Tres consultoras cifran el caos: 6 de cada 10 no puede más y un 84% quiere rebajar gastos
Tres de las principales consultoras del mundo, Deloitte, PwC y Accenture, han publicado en los últimos días informes que revelan algo que tú ya intuías. Basta con dar una vuelta por la calle más comercial de la ciudad o sondear en la cuadrilla cómo llevan los preparativos de la Navidad. Estrés récord. Vaya sorpresón. Ahora hay datos que lo avalan. Seis de cada diez encuestados por Deloitte describen las compras navideñas como estresantes. El 85% deja el carrito de la compra a medias por «indecisión o frustración», según Accenture. Y además, todo está carísimo y a nadie le sobra. El informe de Perspectivas Navideñas 2025 de PwC detalla que el 84% prevé reducir sus gastos. Vamos justitos de espíritu navideño.
«La gente no sólo se siente abrumada por las compras sino que también sufre una gran tensión mental por la constante toma de decisiones», explica la psiquiatra clínica Hannah Nearney. «Cuando el cerebro se sobrecarga de este modo, se activa el 'modo estrés' y eso pude agravar problemas previos, como la ansiedad o la depresión», advierte.
Los bolsillos no andan para muchas fiestas. Deloitte destaca que, además de que el 85% prevé recortar sus gastos, seis de cada diez auguran un debilitamiento de la economía en los próximos meses. Es el registro más pesimista en... ¡30 años! «Esa incertidumbre económica mantiene el cerebro y el sistema nervioso en estado de ansiedad y alerta. Dificulta una correcta planificación y no nos deja disfrutar plenamente de las fiestas». Está en riesgo la Navidad, como diría alarmado cualquiera de esos personajes de Disney que pueblan las películas de estas fechas. Porque detrás de todo este jaleo, de comidas y regalos, subyace la intención de celebrar un año más con los nuestros. Y eso debería ser lo importante.
Tres de cada cuatro compradores se muestra «abrumado» por la multitud de productos y combinaciones que facilitan, en teoría, el ahorro. ¿Compensa o no? ¿Tienen lo mismo más barato en otro sitio? ¿Hay alguna oferta que se avecina? El cansancio no se debe tanto a la compra en sí sino a la sensación permanente de tener que tomar decisiones a la velocidad del rayo. «La solución al agotamiento cognitivo no es evitar la toma de decisiones, sino practicar el autocuidado. Y eso se puede hacer de muchas maneras, desde la actividad física a la meditación, y también planificando esas compras para incluir descansos», defiende Nearney.
La 'generación X' -los nacidos entre 1965 y 1980, aproximadamente- planean recortar la inversión navideña un 23% y dedicarán una parte «al bienestar y la salud mental». Para la psiquiatra, «los jóvenes se están dando cuenta de que la energía mental es limitada. Y ven la concentración y la calma como recursos que quieren proteger». Cuesta imaginar qué regalo tiene algo que ver con esto. Ejemplo rápido, según los expertos: los auriculares terapéuticos o de estimulación cerebral. O una app de pago que nos ayude a controlar el estrés. «Quienes incorporan en sus rutinas estas técnicas para controlarlo antes de que se convierta en agotamiento suelen experimentar una mejoría en semanas por lo que podría ayudar en estas fechas», valora Nearney.
Accenture explica con detalle que la gente se prepara para el sablazo anual con más vértigo que de costumbre. No es que vayamos alegremente con ganas de expoliar las estanterías, sino que nos tememos que lo mismo de siempre nos saldrá más caro. El 77% de los encuestados espera que los precios suban en esta campaña 11 puntos más que el año pasado.
Volver a casa
Cada uno de los informes echa sus propias cuentas y, como lo hacen desde el otro lado del charco, estiman que el gasto medio en Navidad estará entre 1.089 y 1.595 dólares. PwC ha calculado que, cuando hay hijos en casa, la cifra se duplica. Vayan echando cuentas. Hay un dato curioso. Se ha preguntado a los encuestados cuándo ven que tienen exhausta la cartera, a qué altura de esta carrera hacia la Navidad... Y aquí entra el efecto Black Friday -técnicamente, no acabó este viernes, se 'celebra' hasta que empiece diciembre- porque nada menos que un 24% de los compradores asegura haberse quedado ya sin fondos... Además de regalos y comidas, los viajes, ya sean en familia o para regresar a casa, también elevan las cuantías. En eso, la generación Z viene experimentando un retroceso. Viajarán menos.
También irrumpe, como no podía ser de otro modo, uno de esos conceptos que hemos usado con frecuencia este año: inteligencia artificial. El 33% de los compradores prevé usar la IA para organizar sus compras, más del doble que el año pasado. Cuatro de cada diez de quienes la usan exploran nuevas ideas de regalos y el resto busca ayuda en ella para organizar este terremoto anual.