El Pleno insta de nuevo a Bildu a que se inicie ya la construcción de la estación en Atotxa

El culebrón de la estación de autobuses vivió ayer el que puede ser el penúltimo capítulo de esta interminable historia. El gobierno municipal se ha dado un mes más para presentar «todos los estudios» que avalen su apuesta de construir esta infraestructura bajo el Jardín de la Memoria (Riberas de Loiola), y reconoce que será el Pleno el que tendrá que decidir sobre la materia porque el expediente incluirá un Plan Especial (un cambio en el planeamiento urbanístico) que exige su aprobación por parte de la mayoría de la corporación. Va a ser que no. Los tres grupos de la oposición (19 votos de 27) le dijeron ayer al ejecutivo local que se ahorre el viaje y «comience a construir ya» este equipamiento adjudicado hace casi un año.

El Pleno del Ayuntamiento celebró ayer la sesión ordinaria de enero con una duración de menos de siete horas, la mitad que hace un mes. El grupo PSE presentó una moción para que la corporación se ratificase en el acuerdo adoptado en septiembre para el inicio «con carácter inmediato» de las obras de construcción de la estación de autobuses en Atotxa, y exigiese al gobierno municipal que «en ningún caso se paralizasen los trabajos» sin «los debidos informes técnicos ni el acuerdo mayoritario de la corporación». PSE, PP y PNV votaron a favor de la moción, y Bildu en contra.

Desde que a finales de octubre lograra el apoyo provisional y condicionado del PP para definir una propuesta de ubicación de la estación en Riberas de Loiola, el gobierno municipal ha perdido muchas bazas para defender su apuesta. Primero se demostró que el TAV no podía tener una parada en esta ubicación, luego llegó la negativa del Gobierno Vasco a ceder la parcela, después perdió el apoyo del PP ante su negativa a impulsar el Metro (lo que conlleva disminuir la intermodalidad de Riberas), y finalmente Bildu propuso una nueva ubicación para este equipamiento dentro de este barrio pero bajo el Jardín de la Memoria. El planteamiento de llevar la estación de autobuses a Riberas estaba, antes del Pleno, herido de muerte. Tras la sesión de ayer, agoniza.

El gobierno municipal quemó, no obstante, el penúltimo cartucho. El concejal de Movilidad, Jon Albizu, señaló que «dentro de un mes» se presentará el informe completo de todos los técnicos municipales, se dará a conocer el «proyecto básico» de la estación, y después se someterá al Pleno la aprobación del Plan Especial que permitiría urbanísticamente llevar a cabo la operación. Éste último es un trámite más cuya necesidad no había aclarado el gobierno municipal hasta la fecha. Para hacer la estación en Riberas de Loiola hay que cambiar el planeamiento urbanístico, por lo que el gobierno necesita de la aprobación del Pleno para materializar la medida.

No parece fácil que la corporación vaya a cambiar en dos meses su voto de ayer: 19 a favor de hacer la estación en Atotxa, 8 a favor de hacerla en Riberas. Albizu advirtió que «si elegimos mal nos vamos a quedar con una estación caduca y trasnochada desde el día de su construcción. Será un lastre para la ciudad y su futuro, no para este gobierno o para este concejal». Bildu defendió su opción como «creíble y sólida».

No lo piensa así el resto de la corporación. El portavoz del PSE, Ernesto Gasco, criticó lo que también destacaron otros portavoces: «Ustedes primero toman la decisión de llevar la estación de autobuses a Riberas de Loiola y luego encargan los estudios. Hombre, no suena eso bien. Es al revés como se deben hacer las cosas». Gasco recordó a Albizu que el Ayuntamiento ya tenía resuelto este problema, «pero ustedes han decidido cargarse esta solución y de momento seguimos sin una alternativa encima de la mesa». Exhortó a los miembros de Bildu a que «no despilfarren el dinero público» y «empiecen a construir ya la estación de Atotxa. Se lo decimos alto y claro, estación de autobuses en Atotxa ya. Orain», remachó.

«El TAV llegará, pese a Bildu»

El portavoz del PP, Ramón Gómez, reiteró que «no vamos a permitir que se retrase un solo día más» la construcción de la estación. Explicó que «el rechazo de Bildu al Metro impidió la intermodalidad en Riberas de Loiola de los diferentes sistemas de transporte», y como la llegada del TAV a Atotxa «será un hecho, pese al rechazo de Bildu, defendemos la intermodalidad que ahora será entre la alta velocidad ferroviaria y la estación de autobuses». El PP «se ratifica en el acuerdo de Pleno de septiembre» para que «comiencen de inmediato las obras de la estación de autobuses de Atotxa».

El portavoz del PNV, Eneko Goia, reconoció que el Ayuntamiento con este asunto «está dando un espectáculo de incapacidad de adoptar decisiones que es preocupante». «Que es una estación de autobuses, no Cabo Cañaveral», llamó la atención en otro momento del debate. El concejal censuró a Bildu que diga ahora que va a presentar en un mes los estudios: «¿Quiere esto decir que asume que se ha tomado decisiones sin tener información?», se preguntó. Goia reclamó a Bildu que «acepte las reglas del juego y tire para adelante» con la construcción de la estación de autobuses en el paseo Federico García Lorca.