El truco de un nutricionista para conservar el tomate sin moho: «No volverás a tirar un bote»

¿Alguna vez has abierto un bote de tomate y después de unos días has tenido que tirarlo porque estaba cubierto de moho? El nutricionista Miodrag Borges ha compartido un truco sencillo y práctico para evitar este problema. «Hoy os presentamos un truco con el que no volverás a tirar un bote de tomate abierto porque se haya llenado de moho», asegura Borges.

La solución es tan simple como ingeniosa: necesitas una cubitera limpia. «Únicamente necesitas una cubitera limpia (o varias dependiendo de la cantidad), a la que añadimos el tomate en todos los huecos», explica el experto. Para un mejor resultado, sugiere usar una espátula para distribuir el tomate de manera uniforme.

Pero este método no solo resuelve el problema del moho, también permite personalizar el sabor de tus preparaciones. «Además le puedes agregar las especias que más te gusten. En este caso, cúrcuma, ajo en polvo y orégano», detalla Borges. Con este toque, tus cubitos de tomate no solo serán prácticos, sino también un aporte de sabor listo para usar.

El siguiente paso es muy fácil: «Nos lo llevamos al congelador y, en unas horas, ya tienes unos dados congelados de tomate», comenta. Una vez congelados, estos cubos son ideales para usarlos en cualquier plato que requiera tomate, desde salsas hasta guisos, sin preocuparte por que se estropeen.

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El truco de Borges no solo prolonga la vida útil del tomate, sino que también añade un toque gourmet a tus recetas diarias. «Con una gran durabilidad y que además están aromatizados, le darán un toque espectacular a tus platos», afirma.