Los hosteleros temen pagar las consecuencias de Navidad con otro cierre

Aún no han salido del segundo periodo de cierre obligatorio en lo que va de pandemia y ya están pensando en cómo sobrevivir al tercero. Los hosteleros guipuzcoanos se muestran «muy preocupados» por las decisiones que están por tomar, pero sobre todo, por las consecuencias que estas pueden acarrear en sus negocios. El sector quiere recuperar su actividad, pero también teme pagar los platos rotos que vayan a quedar en el territorio a partir del 6 de enero.

Consideran que estas navidades el foco del problema va a estar en esas comidas y cenas familiares, que aún tienen pendiente de concretar el número máximo de asistentes permitidos. Creen que va a ser en esos contextos donde empiece a gestarse la tercera ola de esta crisis sanitarias, pero que sin embargo, una vez se produzca ese repunte de contagios a mediados de enero «serán los hosteleros los que tengan que sufrir las consecuencias, cerrar de nuevo y sin esos 200 millones de euros de ayudas directas» para todo el sector que hay en Euskadi, que suma 60.000 personas. «Es tremendamente injusto», señalan desde Hostelería Gipuzkoa.

El sector está muy pendiente de lo que mañana decida el consejo asesor del LABI, pero no solo sobre la fecha de reapertura, sino también en las condiciones en la que ésta se producirá. El Gobierno Vasco ya desveló que no descartaba la fórmula de solo terrazas, al considerar que existe un mayor riesgo de contagio en el interior de los establecimientos. Una decisión que el sector no comparte y que, de hecho, ve incompatible con permitir las celebraciones en viviendas particulares.