Tengo entradas para un evento que se ha cancelado, ¿cómo recupero el dinero?
Desde la Asociación de Consumidores Vascos aseguran que hay que acudir directamente al organizador del acto porque los usuarios tienen derecho «a la devolución íntegra del dinero»
Las nuevas restricciones impuestas por el LABI y que han entrado en vigor este mismo miércoles han pillado a muchas personas con entradas para conciertos, eventos y los habituales cotillones de Nochevieja que se iban a celebrar la madrugada del día 31 que, finalmente, se han suspendido, o en el mejor de los supuestos se han pospuesto, a consecuencia del cierre de todos los locales a la una de la madrugada y la reducción de aforos para hacer frente a la sexta ola de la pandemia azotada por la variante Ómicron. ¿Qué ocurre si estoy en posesión de uno de esos billetes? ¿Tengo derecho a que me devuelvan el dinero?
«Si he contratado yo un servicio y este servicio no se puede dar en las condiciones que yo contraté, tienes derecho a la rescisión de ese contrato, porque no deja de ser un contrato, y a la devolución íntegra de todo el dinero», explica Koldo Navascues, presidente de EKA/ACUV, la Asociación de Personas Consumidoras y Usuarias Vascas. «Es una causa ajena tanto al organizador como al consumidor, pero si tú has hecho ya un abono de una cantidad por ese acto, te lo tienen que devolver», añade.
Los pasos a seguir son muy sencillos. «Tienes que acudir directamente al emisor de ese evento, ya sea un hotel, una sala de fiestas o lo que sea, y solicitar la devolución de esa reserva y la devolución íntegra del dinero que se haya adelantado», asegura. En ese sentido, «da igual qué tipo de entrada sea», un concierto, un cotillón u cualquier otro evento sociocultural, porque «cualquier cosa que se haya anulado por fuerza mayor como es este caso, el organizador tiene que devolver el dinero íntegramente sin hacer ningún tipo de deducciones ni descuentos ni nada».
El orginazador, eso sí, puede proponer alguna alternativa al usuario (fechas alternativas al día señalado, bonos por el mismo valor, etc.) que el consumidor, que es el que tiene la última palabra, puede aceptar o no. «Si la oferta no nos convence, tenemos el derecho a que se nos devuelva el dinero íntegramente», recuerda Navascues.
En casa de no poder recuperar esa cuantía que se ha pagado, el presidente de EKA/ACUV apunta dos soluciones drásticas. «Una, acudir a una asociación de consumidores para que te hagan la reclamación extrajudicial y, si eso no da lugar, directamente acudir a un juzgado. La vía judicial siempre queda como último recurso», sentencia.