Unos padres dejan a su hijo de 10 años en el aeropuerto de Barcelona y se van de vacaciones sin él: «Como madre, flipo»

En verano los aeropuertos reciben un mayor volumen de personas en movimiento, bien ya sea por ocio o trabajo, lo que automáticamente genera que entre sus terminales sucedan historias bonitas, divertidas, tristes o indignantes. Está claro que los empleados del sector aeroportuario habrán asistido a auténticas anécdotas, pero para Lilian, una coordinadora de vuelos en el aeropuerto Barcelona-El Prat, lo que ha vivido esta semana ha superado con creces todas sus expectativas.

Ella misma afirma en un TikTok que ha publicado en su cuenta '@limasin41' que «como coordinadora aérea he visto mogollón de cosas, pero esto ya ha sido totalmente surrealista». Como un día corriente, la trabajadora chequea la coordinación del vuelo, el pesaje, los tiempos y el equipaje. Cuando llega a la oficina para dejar la documentación sobre ese vuelo que estaba a punto de partir le informan de que el avión había vuelto a parking porque había un niño en la terminal.

Cuando Lilian llega a la zona se encuentra al menor de 10 años acompañado por la polícia, donde les dijo que «sus padres estaban en el avión camino a su país de origen, que se iban de vacaciones». Por si no fuera poco, la coordinadora aérea decide conectar con el comandante del avión, que le termina confirmando que al recibir el aviso desde la torre de control hicieron «una voz para ver si alguien se había dejado un niño en la terminal y nadie había contestado».

Ante esta situación tan desconcertante, la Guardia Civil finalmente pudo identificar a los pasajeros y la tripulación dio con los padres del niño en cuestión, que además iban con otro menor más pequeño. Su justificación sobre su actuar fue porque «el pasaporte de su país estaba caducado, asi que dejaron el niño en la terminal y llamaron a un familiar para que viniera a recogerlo».

Una decisión que la familia vio totalmente lógica pero que el personal asistente discrepó al momento: «Ellos lo vieron muy normal, pero obviamente yo no lo vi normal y la Policía tampoco», incide la trabajadora. Añade que avisaron a los padres de que eso no se podía hacer y la Policía se acabó llevando a los padres y al otro niño a la comisaría del aeropuerto.

Lilian además de coordinadora aérea también es madre, y concluye su vídeo preguntándose «cómo ellos cogen tan tranquilos el vuelo y se van dejando al niño. Como madre, flipo». Aunque pasen muchas historias intrigantes en los aeropuertos, la empleada aérea espera no volver a encontrarse nunca más con una situación así.

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