Dimite el directivo de Osakidetza que seguía en su cargo tras el escándalo de la OPE

La dimisión de Arcelay, el hombre que acompañó sistemáticamente a la directora del Servicio Vasco de Salud, María Jesús Múgica, en cada rueda de prensa y comparecencia pública ligada a la controvertida OPE, llega casi dos años después de la marcha de su jefa; y un año y medio más tarde que la del propio consejero, Jon Darpón. Partidos políticos y agrupaciones sindicales habían reclamado su cese una y otra vez, pero ni el nuevo director general de Osakidetza, Juan Diego Casals, ni el equipo que ha dirigido Nekane Murga, heredero de la gestión de Darpón, se atrevieron a dar el paso.

La explicación oficial justifica la salida de Arcelay en «motivos personales». Ese es también el argumento que el directivo habría dado a su equipo en los últimos días. Su marcha podría estar más relacionada, sin embargo, con la llegada al departamento de la nueva consejera, Gotzone Sagardui, que estaría interesada en hacer borrón y cuenta nueva y lavar al nuevo Gobierno la cara con lo referido al fraude en la Oferta Pública de Empleo que está bajo sospecha.

Todos los altos cargos de la sanidad vasca involucrados de una u otra manera en el fraude que han dimitido lo han hecho «a voluntad propia». La primera en colgar la bata fue la directora general. Contra viento y marea y pese a la caída de sus superiores, Arcelay aguantó en su puesto. La renovación del Departamento ha quebrado su firmeza.