Ayuntamiento de San Sebastián y Gobierno Vasco invertirán 12 millones en la regeneración integral de Altza

La inversión se centrará en las zonas más vulnerables del barrio: Harria, Arriaga, Arrizar, Roteta, Casares y Santa Bárbara. Mediante este plan, se prevé la rehabilitación integral de 12 portales y 124 viviendas de estas zonas de Altza. Las intervenciones en edificios incluirán la renovación energética envolvente (fachada y cubierta), mejora de protección contra incendios, instalación de placas fotovoltaicas y sustitución de calderas, además de mejoras de accesibilidad como ascensores y adecuación a cota cero.

Fomento, Etxegintza y los departamentos de Medio Ambiente, Mantenimiento Urbano y Proyectos y Obras, que participan en esta operación, coinciden en que todas estas intervenciones impactarán positivamente en el barrio, reduciendo el gasto energético y las emisiones de CO2. Con este proyecto, San Sebastián se suma al programa del Gobierno Vasco de regeneración urbana integral de barrios vulnerables para mejorar su calidad de vida y su capacidad de respuesta ante el cambio climático, un plan en el que participan ya 21 municipios de toda Euskadi.

Goia destacó que «hay que invertir en los barrios que tienen rentas más bajas para igualar su calidad de vida al resto de la ciudad» y puso el foco en las inversiones que el Ayuntamiento ha hecho en el barrio de Altza, resaltando los 20 millones de euros que se gastaron para construir el polideportivo del barrio. Sin ninguna fecha concreta, el regidor señaló que las obras y actuaciones correspondientes se pondrán en marcha cuanto antes.

Estás mejoras beneficiarán a más de 100 comunidades de vecinos. «Queremos acabar con las situaciones de vulnerabilidad y alcanzar unos estándares de habitabilidad adecuados», explicó Miguel de los Toyos, viceconsejero de Planificación Territorial y Agenda Urbana. De los 12,4 millones de euros que se invertirán en estas actuaciones, el Gobierno Vasco aportará 9,4 millones.

De los Toyos destacó que Donostia «ha hecho una apuesta por la política pública de regeneración urbana» y que «este es el camino para seguir mejorando los barrios de la ciudad y las vidas de sus residentes». La decisión de realizar las obras quedará en manos de cada comunidad de vecinos, aunque cree que «prácticamente todas seguirán adelante porque esta es una oportunidad difícil de rechazar». El plan del Gobierno Vasco, que comenzó en los barrios de Txonta en Eibar y Otxarkoaga en Bilbao para llegar a Lasarte-Oria o Pasaia, ahora se materializará en Altza.

También se renovarán espacios no edificados como el parque Harria-Pikabea, donde se mejorará la accesibilidad y se recuperarán terrenos contaminados por amianto, ampliando el espacio urbano y consiguiendo la creación de un parque público. Asimismo, se llevará a cabo la renaturalización de arbolado en plazas y calles, y de regatas como Auditz Akular. Además, se colocarán energías renovables en viveros públicos y sistemas urbanos de drenaje sostenible.

También se mejorará el paisaje del parque natural de Lau Haizeta en el entorno de la zona vulnerable incluyendo, por ejemplo, mejora de cartelería, itinerarios QR y conteo de visitantes para establecer acciones que fomenten el conocimiento de este pulmón verde.

Esta actuación integral pondrá en marcha un proyecto piloto de comunidad energética a través de una instalación fotovoltaica para autoconsumo para la ikastola Oleta y viviendas próximas. También se incluirá un programa de sensibilización y orientación a las comunidades de propietarios de los edificios rehabilitados que puedan instalar placas fotovoltaicas en cubiertas.

Para que los vecinos de Altza puedan resolver sus dudas e informarse sobre estas actuaciones se abrirá una oficina de proximidad para canalizar las ayudas de las intervenciones. Será una estructura de apoyo e impulso de la eco rehabilitación, que actuará como referente y catalizador de inversiones de mejora de la eficiencia energética. El gobierno municipal pretende sensibilizar, captar y ofrecer un servicio de acompañamiento a la ciudadanía. Asimismo, se realizará un proceso de reflexión colaborativa de regeneración urbana con ciudadanos y agentes clave.

Entre esos agentes se han añadido a los comerciantes del barrio de Altza, a los que se ayudará con servicios de asesoramiento en eficiencia energética, herramientas de monitorización y compra agrupada de electricidad de origen renovable, además de asesoramiento tecnológico y digital.

Estas obras y remodelaciones se sumarán a las ya aprobadas en la Junta del Gobierno Local el pasado 19 de octubre. Entonces se acordó la renovación del paseo Larratxo 26 para eliminar las barreras arquitectónicas existentes. Lo mismo sucederá en el número 80 de la misma calle, donde además se construirá una nueva rampa para facilitar el acceso a los peatones. En Altza se mejorará la accesibilidad entre la calle Roteta Goikoa y el paseo de Altza, donde también se eliminarán barreras arquitectónicas y se construirán rampas. Unas obras que constarán 352.929 euros.

El proyecto de regeneración urbana integral del barrio de Altza irá acompañado de un programa de empleo y formación gestionado por Fomento e impulsado con el apoyo del Departamento de Trabajo y Empleo del Gobierno Vasco para la adquisición de nuevas competencias que supongan una nueva salida profesional y un aumento de la empleabilidad.

La concejala de Desarrollo Económico y Empleo, Marisol Garmendia, destacó ayer que este plan cuenta con un apartado para garantizar la inserción laboral de los habitantes que lo tienen más complicado. «Altza tienen un índice de desempleo del 10%, lo que supera en dos puntos la media de Donostia, y ponemos en marcha estas acciones para dar salidas a grupos vulnerables como los mayores de 45 años o a las mujeres», explicó.

Este programa dará prioridad a perceptores de RGI y parados de larga duración. Se realizará una primera fase de formación en competencias sociolaborales de dos meses y posteriormente una segunda fase de contratación de diez meses (acompañada de formación específica y orientación laboral) apoyando la inserción laboral de las personas participantes. De esta forma, los habitantes del barrio podrán volver al mercado laboral.