Tras tocar el cielo, el reto es seguir arriba
Las traineras guipuzcoanas ·
Tras mantener el equipo que el pasado verano dio la primera corona al club, Orio vuelve a emerger como una de las traineras llamadas a pugnar por cada banderaDiecisiete temporadas le costó a Orio despojarse del sambenito de ser el club arraunlari más laureado de la historia pero que nunca había conquistado ... la corona ACT. La fue a ganar el año menos esperado, el pasado, cuando debió hacer frente a la pérdida de ocho remeros, siete de ellos titulares con gran peso específico. Por suerte, el deporte no es una ciencia exacta, y menos las regatas de traineras donde tantos factores influyen. Pero nadie puede poner en duda que la trainera aguilucha es una de las favoritas a revalidar el título, pues esta vez ha mantenido al equipo campeón, lo que suele ser garantía al menos para no darse un gran batacazo.
La tripulación que por cuarto año prepara Jon Salsamendi solo presenta tres bajas respecto al curso pasado. El castreño Alexander Esteban entrenará esta temporada a Deusto en la ARC1. Se ha llevado con él al getxotarra Paul Galdiz, que llevaba en Orio desde el inicio del ciclo de Salsamendi. El itziartarra Odei Arrizabalaga, que cuajó un gran 2019 tras salir de una grave lesión, ha hecho un paréntesis en el remo. También se ha bajado de la popa Ugaitz Mendizabal. El iruratarra tuvo doble ficha en 2019 y suplió a Gorka Aranberri en el triunfo aguilucho en Boiro.
Los tres únicos remeros que han dejado el club han sido suplidos por otros tres que ya conocían la entidad
continuidad
Las tres novedades no han tenido que adaptarse demasiado, pues conocían el club. Dos son canteranos: Unai Etxeberria regresa tras el respiro del curso pasado, en el que Mikel Aiestaran se curtió en la banda de babor de la Libia cedido en San Pedro. El ondarrutarra Jon Iriondo, residente en Orio muchos años, regresa a la entidad en la que bogó hasta 2005, curiosamente también con Salsamendi como técnico. Es el único superviviente del ocho que firmó el undécimo título estatal en doce años, y último hasta el logrado en 2018. Tras un periplo en Bermeo, Castro, Portugalete y Ondarroa, donde ejerció de entrenador, será el más veterano del plantel a sus 43 años. Casi también es un refuerzo Bersaitz Azkue, recuperado de una grave lesión de espalda.
Sin patrocinador principal
Resulta significativo que el club que por primera vez ganó el mismo año los títulos masculino y femenino no haya podido encontrar un patrocinador principal tras la marcha de Babyauto. Pese a ello, la entidad que ahora preside Iosu Esnaola no ha bajado el listón de sus sueños.
Repetir el bagaje de 2019 será complicado. Además de alzar la corona, el primer equipo la adornó con ocho banderas ligueras, además del Campeonato de Gipuzkoa. Se les escaparon, eso sí, los tres premios gordos que logró Hondarribia: Campeonato de Euskadi, Zarauzko Estropadak y Bandera de La Concha.
El conjunto femenino, que sigue preparado por Xanti Zabaleta, tratará de revalidar sus éxitos en la Liga Euskotren y la bahía donostiarra. Por su parte, Anjel Larrañaga continuará al frente de la segunda trainera, que comparte «más de la mitad de los entrenamientos» con el primer equipo, explica Salsamendi, cuñado además de Larrañaga. «El año pasado –apunta el oriotarra– ganaron muchas regatas, algo que no harán este, pero el objetivo en una trainera de formación es el mismo: trabajar día a día con la mayor calidad posible, porque el futuro de Orio pasa por el segundo bote», indica Salsamendi.
7 guipuzcoanos seleccionados
El oriotarra Oihan Gozategi, hijo del dos veces olímpico y subcampeón mundial de dos sin en 1990 Ibon Urbieta, ha sido convocado para una concentración de la selección sub-23 ligera en Banyoles. También lo han sido con miras a citas internacionales los sub-23 Koxme Burutaran (Raspas) en Sevilla y Aitzpea Gonzalez (Santiagotarrak) en Amposta; y los júniors Helene Sagarzazu y Naroa Zubimendi (Santiagotarrak) e Irati Mercader y Ander Balda (Ur Kirolak), en Ourense.
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