Zubieta, la envidia de las mejores canteras
Resultados. La Real ha sacado en esta década más futbolistas que las del Real Madrid y Barcelona, en las que solo Carvajal y Lucas juegan en el primer equipo
El último movimiento del Barcelona para llevarse a un chaval de 14 años de Zubieta a La Masía, contado en estas páginas el pasado ... lunes, no representa ninguna novedad. Es algo que la mayoría de los clubes llevan tiempo haciendo, aunque la FIFA haya intentado recientemente legislar las transferencias entre menores en el ámbito internacional para evitar el mercadeo de niños. Así, están prohibidos los fichajes de comunitarios menores de 16 años y de extracomunitarios de 18.
Sin embargo, dentro de un mismo país no hay limitación alguna, aunque otra cosa es la idoneidad de salir de casa a una edad tan temprana y si recalar en un club de dimensión mundial como el Barcelona o el Real Madrid garantiza luego una carrera profesional. Este estudio va a comparar la salida que han ofrecido en la última década los centros de formación de los dos grandes de la Liga respecto a Zubieta.
El objetivo es hacer una fotografía de lo que había en las tres canteras hace diez años y ver qué ha sido de aquellos chavales que tanto prometían. Como punto de partida establecemos la temporada 10/11, justo hace diez años, y se tienen en cuenta los jugadores que integraban las categorías inferiores, desde el filial hacia abajo, con dos excepciones: los que ya habían debutado en el primer equipo o los fichados ese mismo año de otros clubes de federaciones distintas.
En la Real, por ejemplo, no se incluye a Illarramendi, que jugaba en el Sanse, porque ya se había estrenado la campaña anterior con los mayores. Lo mismo ocurre en el Barcelona con Sergi Gómez, Oriol Romeu y Sergi Roberto, y en el Real Madrid con Álex Fernández, Morata y Sarabia.
Llegan más al primer equipo...
Hecha esta salvedad, y ya de entrada, se constata que en Zubieta es mucho más fácil llegar al primer equipo que en La Masía o en La Fábrica. Cinco jugadores que se encontraban hace diez años en los equipos inferiores de la Real están hoy a las órdenes de Imanol: Zaldua, Aritz, Sangalli, Gorosabel y Zubeldia. Hasta hace dos meses había un sexto, Rubén Pardo, que en el mercado de invierno fichó por el Girondins. Luego estaría Guridi, cedido en el Mirandés para recuperarse de una grave lesión de rodilla, que ya formó parte del primer equipo y que regresará en verano.
Además, hay tres futbolistas que no vestían propiamente de blanquiazul pero jugaban en clubes convenidos de la Real o se entrenaban en Zubieta. Se trata de Merquelanz y Barrenetxea, que lo hacían en el Antiguoko cadete y benjamín, respectivamente, y de Oyarzabal, en el infantil del Eibar. Merquelanz, al igual que Guridi, también fue cedido tras sufrir una grave lesión y volverá a casa para la próxima campaña.
En el Real Madrid solo hallamos a Carvajal y Lucas Vázquez, y ambos se encontraban ya muy cerca del fútbol profesional, el primero en el Castilla y el segundo en el Real Madrid C. En el Barcelona no hay ningún caso, ya que los canteranos que tiene -Messi, Piqué, Busquets y Sergi Roberto- habían debutado en el primer equipo y Ansu Fati ingresó en La Masía más tarde. Ninguno de aquellos que integraban las categorías inferiores azulgranas en la 10/11 figura hoy en día en el primer equipo.
El segundo dato significativo muestra que el proceso de formación en Zubieta es más completo, porque los futbolistas que llegan lo hacen desde más abajo. Hace diez años, Barrenetxea era benjamín; Zubeldia y Oyarzabal, infantiles; Sangalli, Guridi, Merquelanz y Gorosabel, cadetes; y Zaldua, Pardo y Aritz, juveniles. Es decir, la pirámide se ensancha por la base, lo que significa que las posibilidades de llegar dependen en buena medida del proceso de formación, no de que te incorporen a la cantera en edades más próximas al fútbol profesional -ocurrió aquí con Le Normand-, como sucede en Madrid y Barcelona.
Ahora mismo la plantilla del Sanse lleva una media de seis años en el club. Pero hay más. Si se echa la vista más allá de 2010 y nos fijamos en los jugadores que ha dado Zubieta al fútbol, se observa que la gran mayoría ingresó en la academia realista entre los 12 y los 14 años. Es el caso de Zurutuza, Illarramendi, Griezmann, Iñigo Martínez, Zaldua, Pardo, Aritz, Odriozola, Sangalli, Guridi, Bautista, Gorosabel, Zubeldia, Aihen, Barrenetxea... Y quienes lo hicieron con 15 años fue porque venían de lejos, como Oyarzabal (Eibar) y Guevara (Alavés), que entraron en Liga Vasca cadete.
La Real lleva cerca de una década aplicando una metodología que la diferencia de otros clubes, marca un estilo propio y fomenta la producción de los futbolistas. Después, la clave está en la promoción en la última milla, como se refiere Aperribay a esa etapa de llegada y consolidación al primer equipo.
Más futbolistas profesionales
Es evidente que la exigencia para jugar en un Real Madrid o un Barcelona es mayor que en la Real, porque poseen semejante potencial económico que nutren sus plantillas de extranjeros en su mayoría. Se podría pensar, sin embargo, que de no llegar al primer equipo el sello de La Masía o La Fábrica significa un salvoconducto para ser profesional. Tampoco es así. En lo cuantitativo, Zubieta aporta jugadores en cifras similares a los otros dos centros de formación o incluso superiores.
De los jugadores que en la campaña 10/11 pertenecían a los conjuntos formativos blanquiazules, 24 militan hoy en Primera, Segunda o primeras ligas extranjeras, contando los casos referidos de Oyarzabal, Merquelanz y Barrenetxea. Se hace esta precisión porque en la Real no hay equipos formados hasta los 13 años, cuando muchos clubes profesionales los tienen desde los 8 o 9 años.
Además de Oyarzabal y Barrenetxea, en la Real están Zaldua, Aritz, Sangalli, Gorosabel y Zubeldia. Sin salir de Primera, Iñigo Martínez, Unai López y Kenan Kodro militan en el Athletic, mientras que Hervías lo hace en el Valladolid. En el Top 5 de las ligas europeas se encuentran Odriozola (Bayern) y Rubén Pardo (Girondins), y en Segunda División, Marco Sangalli (Oviedo), Alain Oyarzun (Numancia), Javi Ros (Zaragoza), Kako Sanz (del Numancia, aunque ahora cedido en el Castellón), más los mencionados Merquelanz y Guridi (Mirandés). Además, y en primeras divisiones de otros países, Bautista juega en el KAS Eupen de Bélgica, Capilla en el Asteras Tripoli griego, Jon Gaztañaga en el AEL Limassol de Chipre, Joseba Beitia en el Mohun Bagan, campeón de la Indian Super League, e Iker Hernández en el Royal Pari de Bolivia. De estos 24 jugadores, 19 son guipuzcoanos.
En el Real Madrid son veinte los jugadores que, estando en La Fábrica en esa campaña 10/11, juegan hoy en el fútbol profesional de alto nivel. En su primer equipo militan Carvajal y Lucas Vázquez, y en otros clubes de LaLiga lo hacen Reguilón (Sevilla), Llorente (Real), Hermoso (Atlético), Sobrino (Valencia), Melero (Levante), Pacheco (Alavés), Aleix Febas (Mallorca) y Raúl de Tomás (Espanyol). En Segunda aparecen Alfonso Herrero (Oviedo), Derik Osede (Numancia), José León (Fuenlabrada), Javi Muñoz (Tenerife) y Enzo Zidane (Almería), mientras que en el extranjero están Cristian Benavente (Nantes), Jesé Rodríguez (Sporting Portugal), Fran Sol (Dinamo Kiev), Dani Ramírez (Lech Poznan) y Javi Noblegas (NAC Breda).
Existen dos casos sorprendentes. Iván Sáez (1995) fue internacional sub-19 y llegó a entrenar con el primer equipo, pero a los 20 años colgó las botas. Álvaro López (1991) era el capitán de la sub-17 campeona de Europa con Canales y Thiago, entre otros, pero después de pasar por el Levante B y el Alcorcón lo dejó con 25 años.
En el Barcelona hemos encontrado 15 futbolistas que estando hace diez años en La Masía son hoy profesionales. Ninguno viste de azulgrana. En LaLiga están Quintillà (Villarreal), Rafinha (Celta) y Sandro (Valladolid), mientras que en campeonatos del Top 5 continental se hallan Bellerín (Arsenal), Adama Traoré (Wolverhampton), Deulofeu (Watford), Sanabria (Genoa) y Gabarrón (Lazio).
Entre los 'juguetes rotos' de La Masía sorprende Fran Álvarez (1996), un lateral zurdo elegido mejor jugador del Torneo Promises con 12 años y que desde enero está sin equipo.
Un 52% de los jugadores del primer equipo son formados en casa
La Real es con diferencia el que más futbolistas formados en casa tiene. De los 23 integrantes del plantel, doce poseen label de Zubieta: Zaldua, Gorosabel, Aritz, Aihen, Illarramendi, Zubeldia, Guevara, Zurutuza, Sangalli, Oyarzabal, Barrenetxea y Zubiaurre. En el Real Madrid hay tres, Nacho, Carvajal y Lucas Vázquez; y cinco en el Barcelona, Piqué, Busquets, Messi, Sergi Roberto y Ansu Fati, aunque desde el adiós de Guardiola al club en 2012 la promoción de los jóvenes se ha estancado.
Después hay casos de jugadores a los que se les ficha cerca de los 20 años y aterrizan en el segundo equipo para foguearse. No podrían llamarse propiamente canteranos, aunque hayan pasado por el filial. En la Real está Le Normand, que llegó con 19 procedente del Brest y ha completado tres temporadas en el Sanse hasta dar el salto. El Real Madrid hizo lo propio con el brasileño Casemiro y el uruguayo Valverde, a los que incorporó con 20 y 19, respectivamente, del Sao Paulo y el Peñarol. A Mariano, nacido en Catalunya, lo fichó con 18 años del Badalona para el juvenil A.
Roberto Olabe, director de fútbol de la Real, siempre ha dejado claro en sus comparecencias públicas cuál es el camino del club: «Creo absolutamente en la cantera. Debemos estar orgullosos del trabajo que estamos haciendo, y no solo del porcentaje de canteranos que tenemos en el primer equipo. Nosotros vamos a seguir peleando porque el jugador de Zubieta tenga mucha presencia. Vamos a valorar el peso de minutos sobre el total de los jugadores que hemos formado aquí. Internamente tenemos bastante claro que nuestra génesis va a seguir siendo Gorabide. Las dificultades vienen en la consolidación. El desarrollo lo tenemos en el club y la promoción también la tenemos; el objetivo debe ser la consolidación».
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