Modibo Sagnan jugará lo que resta de curso en el Mirandés
La Real Sociedad lo cede al equipo burgalés para testar su rendimiento en una categoría como Segunda, toda vez que en Anoeta tiene muy difícil jugar
Modibo Sagnan jugará en el Mirandés la segunda parte de la temporada. El central francés tendrá la oportunidad de participar más que hasta ahora en la Real Sociedad en un equipo que lo está haciendo muy bien en su regreso a la categoría de plata. Se da la casualidad de que otros dos blanquiazules, casos de Jon Guridi y Martín Merquelanz, también están a préstamo en el conjunto burgalés. Sagnan estuvo anoche en Anduva viendo cómo el Mirandés ha eliminado al Sevilla de Copa, en compañía de Imanol Agirretxe.
La Real Sociedad ha confirmado esta mañana la noticia adelantada anoche por El Diario Vasco y Anduva será la nueva 'casa' del defensa francés hasta el próximo 30 de junio.
En Zubieta había unanimidad en que había que tomar una decisión con él. Si se quedaba era para tener más oportunidades y, si no, lo más conveniente era buscarle una salida para que a sus 20 años pueda demostrar sus capacidades. Y para eso necesita continuidad.
Imanol y los técnicos están muy contentos con la evolución que ha experimentado en estos seis meses en Zubieta. Sabían que su aterrizaje no iba a ser sencillo por su juventud, por llegar de la segunda división francesa y por tener que adaptarse a un fútbol diferente. Una lesión muscular en pretemporada, en el partido ante Osasuna en Irun, complicó aún más las cosas porque le obligó a parar y a estar más de un mes de baja. Así las cosas, poder asomar la cabeza dentro del equipo se convirtió en una quimera.
No es de extrañar que su participación hasta ahora se haya reducido a los noventa minutos de la eliminatoria de Copa ante el Becerril, saldada con un abultado marcador de 0-8 dada la diferencia entre ambos conjuntos, y a varios amistosos en los parones ligueros en los que siempre ofreció buenos detalles. Especialmente en los dos contra Osasuna, en Tajonar y Zubieta. Pero a Imanol le resultaba complicado dar transferencia a ese trabajo en la Liga. De hecho, su participación en la primera vuelta se ha limitado a tres convocatorias, las dos ante el Betis y contra el Barcelona en Anoeta, sin que llegara a saltar al campo.
Ceuta, punto de inflexión
El punto culminante que llevó a los técnicos a reflexionar sobre su futuro fue la eliminatoria ante el Ceuta, cuando fue el descarte para ver el encuentro desde la grada. Si no jugaba ante un Tercera, ¿cuándo lo iba a hacer? En realidad, aquel día estuvo cerca de ser titular, pero Imanol se ha tomado tan serio la Copa que no quiso dar lugar a la duda y puso en liza a sus mejores hombres. Incluso Remiro jugó por delante de Moyá, cuando todos esperaban al balear bajo palos.
La duda que albergaba la dirección de fútbol es si fuera de la dinámica de Zubieta podría mantener la evolución que ha experimentado en estos seis meses. Desde la llegada de Olabe hay un trabajo personalizado con aquellos chavales que no juegan semanalmente pero que, por su edad, tienen una proyección interesante que se estima positivo para su futuro. Los ejemplos de Barrenetxea, Guevara, Le Normand y Aihen, que no han sido titulares indiscutibles pero que cuando se les ha necesitado han rendido favorablemente, reflejan esa labor que hay por detrás y que permite a los jóvenes progresar aunque no jueguen todos los días.
El Mirandés es un club que reúne las mejores condiciones para que Sagnan pueda mantener esa evolución de los últimos meses. Andoni Iraola es un técnico que juega de una manera muy similar a la Real, tanto en su dibujo como en la forma de comportarse tácticamente. En cuanto al sistema, también emplea un 1-4-3-3, que a veces deriva en un 1-4-2-3-1 o en 1-4-4-2 en función de la ubicación del mediapunta, lo que ha sido tenido en cuenta desde Zubieta. También que guste de empezar la jugada desde atrás y que la participación de los centrales en la iniciación del juego sea importante. Por otro lado, Miranda queda a hora y media, por lo que los técnicos estarán cerca de él.
Hasta ahora en el centro de la defensa burgalesa vienen jugando Odei Onaindia y Sergio González. El primero, natural de Lekeitio, tiene 30 años, se formó en Lezama y es un clásico de la Segunda B. La actual es su primera experiencia en Segunda. González es un madrileño de 27 años que jugó en el Real Madrid en juveniles y que, después de pasar por el Recreativo hace dos temporadas, también se estrena en la división de plata. La cuestión es que ambos centrales son diestros y esa condición de zurdo podría abrirle una oportunidad a Sagnan para que en esta segunda vuelta pueda demostrar sus condiciones en una categoría bastante exigente.
El Mirandés, que ascendió en junio pasado desde Segunda B, está completando un buen curso. Actualmente es décimo en la clasificación, con nueve puntos de ventaja sobre las posiciones de descenso y a dos únicamente del play-off de ascenso. En Copa se ha convertido en el equipo revelación tras eliminar en dieciseisavos al Celta y ayer al Sevilla (3-1) en octavos. Entra en cuartos de final por tercera vez en su historia.