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Es evidente que también hay seguidores del Real Madrid en Gipuzkoa, aunque, con respecto a los de la Real Sociedad, sean una inmensa minoría. Unas decenas de aficionados recibieron con pasión y calor a los jugadores del cuadro blanco, rival txuri-urdin en el Reale Arena esta noche (21.30 horas) en las semifinales de la Copa. Pasadas las 12.20 horas del mediodía del miércoles atravesaban la puerta de llegada los futbolistas merengues, jaleados sobre todo por un nutrido grupo de niños, liberados de sus obligaciones escolares por la huelga de profesores. Mucha camiseta blanca con el dorsal de Mbappé, que no estaba entre los expedicionarios, y mucho grito de apoyo a Vinícius.
Y fue precisamente Vinícius el más solícito y amable con los presentes a la hora de estampar su firma en cuadernos y camisetas y de hacerse algún selfie. También dedicaron unos segundos en atender a los seguidores Rudiger, que fue el primero en hacerlo, Alaba y Bellingham. Los demás pasaron de largo hasta la puerta de salida para subirse cuanto antes el avión y dirigirse al hotel de concentración en Donostia, el NH Aranzazu. Los primeros en ser visibles para los hinchas que estaban esperando fueron Emilio Butragueño, director de Relaciones Institucionales del club madrileño, y Carlo Ancelotti, entrenador blanco, acompañado de su staff.
Sólo fue instante en el que los seguidores madridistas, con camisetas blancas y naranjas, carteles y algunas fotos pudieron ver de cerca a sus ídolos. Una aficionada quiso anunciar que cumplía su 13º cumpleaños y otro proclamaba su fervor por Dani Ceballos. Esta noche tendrán la oportunidad de ver el partido o en el Reale Arena o por televisión, en este caso en abierto (TVE-1).
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