Así juega Mikel Goti, el mediapunta que se ha alejado del juego para acercarse al gol

El jugador del Sanse, que cumple su segunda temporada en la Real tras llegar libre del Athletic, es un centrocampista que juega normalmente de interior derecho. Zurdo, al igual que Brais y Sucic, se mueve por el último tercio del campo, aunque al verse importante en el equipo también le gusta bajar mucho más abajo para recibir.

Sin embargo, desde su aterrizaje en Zubieta, ha vivido una especie de metamorfósis hacia otro tipo de jugador. Llegó siendo un fino estilista, con más detalles que impacto real, pero ya se ha convertido en un jugador muy decisivo en los resultados del Sanse. No es tan participe en el juego y sí muy efectivo cerca del área rival.

Prueba de ese cambio en su juego y también en la mentalidad son los doce goles que acumula esta temporada en el Sanse, además del que anotó en su único partido disputado con el primer equipo ante el Jove en Copa. El repertorio de goles es muy amplio.

Se ha destapado como un buen lanzador de penaltis, aunque no ha metido todos los que ha tirado. En el balón parado es un arma diferencial por su zurda, lo que también le ha hecho peligroso con sus disparos de la frontal anotando varios goles así. Y también ha sido diferencial atacando centros desde segunda línea en el área.

Su temporada es buena por el impacto en muchos resultados del Sanse como el de este fin de semana ante el Amorebieta marcando el único gol del encuentro, aunque ha habido momentos en los que el filial realista ha reqerido de él mayor peso en el juego. En este sentido, sí que es un mediapunta con gran clarividencia en los metros finales. El primer equipo, carente de inventiva en el último tercio durante gran parte de la temporada, agradecería su presencia. Sin embargo, el equipo de Imanol también ha estado gris en el juego y ahí Goti no es un jugador tan capacitado para organizar el juego como puede ser Turrientes.

Llegados a este punto, es evidente que se ha ganado la oportunidad. La competencia en esa posición es muy alta, pero posee algunas características que sus competidores no han demostrado. Se le cae el talento de los bolsillos y este curso ha ganado en voracidad cerca del área contraria. En el apartado físico también ha dado un salto, aunque para ser centrocampista en un equipo de Imanol debe ganar más duelos y ser más poderoso en balones aéreos.