Hablemos de fútbol

A estas alturas, mirar a medio plazo da yuyu, pero es inevitable pensar en las jornadas siguientes donde el equipo se enfrenta a rivales de entidad y pueda dejarse puntos en el camino. Ahora mismo, el equipo linda con adversarios como Sevilla, Betis –que ha apretado el acelerador– y Villarreal. Convenía que el derbi sevillano terminara en tablas. Pero hay que hacer los deberes. Poner tierra de por medio con rivales que puedan incomodar es un objetivo claramente viable.

Fijémonos en como encaraban el partido ambos equipos: los nazaríes sufren bajas de gran calado; los donostiarras, sin embargo, están recuperando a jugadores determinantes. Viendo los planteamientos en cuanto a alineaciones y esquema de juego, se intuía un partido competido. El Granada, muy enfocado en ganar segunda jugada y la Real, fiel a su estilo, con carácter dominador. Duelos interesantes en banda, con un equipo local con dos zurdos, Fede Vico a pierna cambiada y Kenedy, uno de los más inspirados, contra un Gorosabel muy entonado y Aihen, que irá in crescendo según vaya jugando partidos. Por dentro, Eteki y Herrera de stoppers para Merino y Silva. La movilidad del de Arguineguín y la presión tras pérdida del navarro serán determinantes en este sector. En un principio, el emparejamiento de Illarra y Quina se sitúa del lado del de Mutriku. ¿O no? A mí me hubiera gustado ver a Illarra caer entre central-lateral para recibir balón, obligando así a que Quina se tuviera que desplazar hacia las bandas. Esto mismo generaría una medular con mucho recorrido, atrayendo así a los stoppers y facilitando los huecos entre líneas para Januzaj y Oyarzabal (me gusta más por dentro). Isak, enfocado en romper a espaldas de centrales con pocos espacios.

Lamentable lesión de Silva, que no pudo continuar para el minuto 27 con entrada de Guridi. Quizá perdamos precisión y último pase, pero ganamos en disputa y transición. Primera parte con pocas concesiones. Partido donde la efectividad y en este caso la suerte pondrían a los andaluces por delante. Gol con desvío involuntario de Germán. A partir de aquí, Imanol y Labaka pensando en cómo cambiar de efectivos. Y aun con cambios, oportunidad perdida para crecer en estabilidad y estadísticas. Se corta una racha, pero se gana en experiencia. Fútbol de futbolistas.