Anabel Pantoja señala que la investigación sobre el 'síndrome del niño zarandeado' de su hija es «un protocolo rutinario»

La pequeña Alma, hija de Anabel Pantoja y David Rodríguez, se encuentra en el centro de una investigación judicial tras su ingreso en el Hospital Materno Infantil de Gran Canaria, del que fue dado de alta este pasado lunes. La bebé, de apenas dos meses, fue hospitalizada durante 18 días y ha sido objeto de análisis por un posible «síndrome del niño zarandeado», una constelación de hallazgos médicos que en términos médicos pueden deducir un maltrato infantil. Este síndrome se ha convertido en el foco principal de la investigación, después de que el centro hospitalario notificara al juzgado la posible existencia de lesiones compatibles con dicho hallazgo en la menor.

El ingreso de la bebé se produjo el pasado 9 de enero en la Unidad de Medicina Intensiva, donde fue atendida con pronóstico reservado. El hospital, al detectar posibles lesiones, activó el protocolo correspondiente y notificó el caso al Juzgado de Instrucción número 3 de Las Palmas de Gran Canaria, dando inicio a la investigación judicial el 21 de enero. Este procedimiento se desencadenó tras un informe del hospital que alertaba sobre la posible existencia de lesiones en la bebé, lo que llevó a que se considerara la posibilidad del síndrome del niño zarandeado.

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La investigación continúa su curso «con carácter reservado». Fran Fajardo, de Canarias 7, ha explicado en el programa'Y ahora Sonsoles' que se investiga en concreto un «traumatismo craneoencefálico», además aclara que «el hospital emite al juzgado un parte en el que se habla de estas lesiones, ahora se está investigando qué pasó y cómo pasó». El periodista de Vocento explica que Anabel Pantoja y David Rodríguez «han estado dos veces en los juzgados, primero para declarar y después para ser informados de la investigación». El juzgado no acordó tomar ninguna medida cautelar tras tomar declaración a los progenitores y está a la espera del informe del forense «que entiende que las lesiones son de suficiente entidad como para investigar», ha añadido Fajardo. Queda por determinar si el origen es accidental o no.

A última hora de la tarde la misma Anabel Pantoja ha hecho público un vídeo en el que responde: «Me duele tener que hacer este vídeo y que me veáis así después de todo lo que he pasado. No estoy aquí para justificarme de algo que no ha sucedido. Quiero empezar este vídeo diciendo que Alma está en casa, con sus padres, sana y feliz. Quería explicaros que se me ha propuesto hacer un comunicado a través de mi abogado, a través de mi representante, pero he dicho que no». La influencer añade que «hemos vivido una situación muy desagradable, que han vivido muchos padres».

«El 9 de enero Alma sufre un episodio, una crisis puntual. Nosotros actuamos como padres y vamos al hospital. Sabéis lo que hemos pasado estos días. Todo sale bien y estamos en casa. Hay un protocolo, porque el menor tiene mucha protección, cosa que nos encanta y apoyamos. Los médicos pasan el parte porque es un protocolo rutinario. Nos lo comunican y se nos cae el mundo al suelo. Vamos a contarle al juez todo lo sucedido, colaboramos. Por supuesto. Fuimos el lunes y contamos la verdad, nuestra versión, porque con la verdad se va por delante. No nos defendemos de nada. Lo único que hacemos es amar, cuidar, intentar salvar y proteger todo lo que tiene que ver con Alma», relata Pantoja.

«Se han filtrado cosas, se han dicho barbaridades. No me preocupa, aunque me duele en el alma. Se me está acusando de algo que no soy. No me preocupa porque tengo la cabeza en que esto se resuelva y en la salud de Alma. Todo lo que está pasando lo pillaré cuando me recupere de esta situación. La única comprensión que encuentro es mi verdad. Y la única verdad que tengo es que Alma está en casa de sus padres y feliz. Esperamos que toda esta pesadilla termine para poder estar feliz», explica.

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El caso es que el juzgado inicial de Las Palmas de Gran Canaria se inhibió de la causa a favor del partido judicial de San Bartolomé de Tirajana, donde residen los padres y donde se presume que ocurrieron los hechos. Tras 18 días de hospitalización, la bebé recibió el alta este lunes 27 de enero, lo que ha supuesto un gran alivio para la pareja, aunque el proceso judicial sigue su curso.

La investigación judicial continúa con el objetivo de esclarecer las circunstancias exactas de las lesiones sufridas por la menor y determinar si se produjo dicho síndrome del niño zarandeado. La familia y amigos cercanos han mostrado su apoyo incondicional, mientras la pareja espera que todo se resuelva de la mejor manera posible.

El síndrome del niño zarandeado es una forma grave de lesión cerebral que ocurre cuando un bebé o un niño pequeño es sacudido violentamente. Se trata de una forma grave de maltrato infantil que puede tener consecuencias notables para la salud y el desarrollo de un bebé o niño pequeño. Esto ocurre cuando un adulto sacude violentamente al niño, lo que puede provocar daños cerebrales irreversibles, discapacidad permanente e incluso la muerte.Las consecuencias de este síndrome son alarmantes: hemorragias internas, daño cerebral, fracturas y otros problemas graves de salud. Alguons de los niños que sobreviven a esta experiencia sufren posteriormente problemas de aprendizaje, retraso en el desarrollo, epilepsia y otras discapacidades a largo plazo.