Alfredo Alogo debuta el domingo con la Real infantil y estrenará su primera ficha federativa

Para que pueda debutar con el equipo infantil en competición oficial el departamento de Deportes de la Diputación le ha concedido un permiso especial para estas últimas jornadas de la temporada, habida cuenta de que su participación con el Mariño ha llegado prácticamente a su fin. Solo le queda el partido por el tercer y cuarto puesto contra el Añorga que se jugará el domingo 5 de mayo en Zubieta para ver quién es el tercer conjunto guipuzcoano que acompaña al campeonato de Euskadi al Martutene y al Aretxabaleta, que disputarán la gran final.

Alogo se ha entrenado durante toda la semana con el infantil de la Real para terminar de adaptarse al equipo, aunque ya conoce a los compañeros de la pretemporada y de haber disputado un torneo en Navidad en Berriatua. El delantero irunés de origen guineano verá así cumplido su sueño de debutar en partido oficial con la camiseta de la Real Sociedad.

De esta manera la posibilidad de que recale en el Athletic se reduce de forma significativa. Este periódico ya publicó el 14 de marzo, al día siguiente de que en Bilbao vendieran su fichaje a bombo y platillo, que en Zubieta estaban tranquilos ante la enésima maniobra del vecino. La relación de la Real con su familia siempre ha sido muy cercana y esa proximidad está siendo importante para asegurar su continuidad en el fútbol guipuzcoano.

Desde que hace dos años fuera detectado por los ojeadores del club cuando jugaba en el Lengokoak, se ha entrenado de forma regular en Zubieta e incluso su cesión al Mariño fue dirigida desde la Real para que estuviera más cerca de casa, ya que vive en Irun. En verano se ejercitó con el infantil txiki, aunque no ha podido competir con él hasta ahora al estar prohibido por Diputación, algo que se corregirá en estas últimas jornadas.

Delantero de gran proyección por la enorme habilidad con la que se maneja con los pies a pesar de su 1,85 de altura, destacó en el pasado campeonato de España sub-12 jugado a finales de marzo en Madrid, en el que su mejor actuación se dio en la victoria ante Cantabria (7-4) con cinco goles en ese partido.