Los grandes tienen media y meten dos

De hecho, en el empate de Becker -qué buen partido hizo el neerlandés- entran cuatro jugadores al centro de Galán y no es casualidad que la jugada acabara en gol. Antes que eso, el tanto del Almería es una contra de libro, pero es que era mucho premio para lo que se había visto. Luego siguió la avalancha de juego realista, con ese larguero de Zubimendi y unos últimos diez minutos de primera parte de asedio en los que el Almería sufrió lo indecible.

Ante todo lo bueno que tiene este equipo, si algo hay que achacarle, es el gol. Los grandes son grandes porque tienen media y meten dos. Las cifras de los tres delanteros que inician la temporada como puntas son muy pobres. Nos sale bien Oyarzabal, que en sí no era el '9'. Ahí reside la diferencia entre un muy buen equipo y un equipo superior. Aquellos a los que pagas como delanteros deben tener cifras de 10, 12, 15 goles. Si no, todo ese desparrame ofensivo se queda en nada. ¡Y es que el Almería tiró dos veces a puerta y se llevó un empate!

Con el 2-1 no cabía otra cosa que llevarse la victoria, viendo el juego de Real y Almería. Aunque es verdad que en los cambios el resultado fue muy diferente. El Choco Lozano y Ramazani aportaron lo suyo y, sin embargo, ni Kubo, ni André Silva nos dieron mucho. Y el partido estaba de cara para los delanteros. No entraron en juego. El empate nos deja lejos de ese sueño de entrar entre los cuatro primeros. Estos son los partidos que sí o sí hay que sacar adelante. Es una pena, porque el típico empate contra el colista en casa te supone unos puntos que luego echas en falta. Lo de ayer fue muy injusto.

¿El penalti? Si ves cuarenta centímetros de camiseta estirada...