Aihen Muñoz: «La cabeza es lo más importante de un futbolista; siempre hay que ser positivo»
El de Etxauri afirma que llevaba mes y medio preparado mentalmente para ser valiente el día que le tocara jugar y ahora quiere tener continuidad
Aihen Muñoz (Etxauri, 1997) fue uno de los destacados del último partido de Liga. Llevaba dos meses sin ser titular y demostró una personalidad ... y una confianza inusuales en alguien con tanto tiempo fuera del once. Ahora quiere dar continuidad en Villarreal a esa buena actuación en un partido que considera clave para distanciar a un rival directo en la lucha europea.
– ¿Tanto cuesta subirse al tren después de una lesión?
– En enero ya estaba recuperado y listo para jugar, pero no he tenido muchas oportunidades. Entrenando me he sentido a gusto pero el entrenador se ha decantado por otras opciones.
– Su temporada viene marcada por aquella rotura de fibras en Balaídos que sufrió en octubre...
– Empecé muy bien hasta que me lesioné en la visita al Celta. Fueron dos meses en los que me sentí muy a gusto. Después estuve parado hasta navidades y desde entonces he esperado la oportunidad de jugar hasta que me llegó contra el Elche.
– ¿Le ha dado muchas vueltas a lo que habría sido el curso en lo personal sin ese percance?
– Es verdad que la lesión me rompió los planes pero no sirve de mucho pensar en lo que habría pasado sino en afrontar lo que tienes delante. Los primeros dos meses fueron sensacionales, tanto a nivel individual como colectivo, con aquel triunfo histórico en Old Trafford como gran recuerdo. Me quedo con eso.
«En las situaciones adversas hay que intentar leer las cosas buenas y tener la mente tranquila para dar lo mejor de uno»
– Rico también se lesionó, en la primera jornada y le costó desbancancarle hasta lo de Vigo...
– Cuando paras cuesta mucho subirse al tren porque el resto va a otra velocidad, pero el único camino es entrenarse a tope para hacerlo bien cuando llegue la oportunidad de jugar. Diego está haciendo una temporada muy buena. Cuando me lesioné aguantó como un jabato la cantidad de partidos que hubo hasta el parón por el Mundial. Fue más de un mes jugando cada tres días y dio el callo. En mi caso, estoy contento del último partido y a ver si puedo tener más minutos.
– ¿Fue este inicio de temporada su mejor momento en la Real?
– Quizás sí. Me encontraba muy a gusto, la verdad, aunque la temporada pasada también me sentí bien hasta la lesión que tuve en febrero contra el Leipzig.
– Pero nada comparado con el partidazo contra el Manchester United teniendo delante a Antony y Jadon Sancho...
– Me fui muy contento por todo. A nivel personal, porque me salieron bien las cosas, y en lo colectivo porque fue una victoria clave para acabar luego primeros de grupo. Fue un día increíble que nos dio vida a todos porque nos enseñó las cosas que podemos hacer.
«Está haciendo una buena temporada. Cuando me lesioné aguantó como un jabato jugando muchos partidos cada tres días»
– Volviendo al presente, ¿le sorprendió jugar ante el Elche?
– Yo siempre estoy preparado para jugar. Llevaba mes y medio mentalizado, pero si soy sincero no esperaba hacerlo. Me enteré en la charla previa en el hotel y desde ese momento me centré en lo que tenía que hacer.
– ¿Cómo se afronta mentalmente un partido así después de dos meses fuera del once?
– Cuando escuché que iba a jugar me enchufé y me entró esa tensión que tienes con los partidos. Llevaba mes y medio pensando que cuando jugara tenía que ser valiente. Que tenía que encarar en la primera jugada. Así lo hice y me salió bien.
– Parecía que estaba jugando una final...
– Era un reto personal. Tenía que demostrarme a mí mismo que puedo ser titular y jugar más minutos. Salí con hambre y si la actitud es buena, las cosas salen.
«No es un puesto fácil. Si me pones de mediapunta no lo haré tan bien como él, pero si al mediapunta lo colocas de lateral, sufrirá»
– ¿Se ha apoyado en alguien a nivel psicológico en este tiempo para llegar tan bien preparado cuando ha vuelto a jugar?
– Después de tantos años con Imanol Ibarrondo ya tengo las herramientas necesarias para afrontar situaciones como la del primer partido después de dos meses sin jugar. Ha sido mucho tiempo yendo los dos de la mano y ahora mismo ha sido un trabajo psicológico que he realizado yo solo. En las situaciones más adversas hay que intentar leer las cosas buenas que también las hay, tener la mente tranquila para dar lo mejor de mí y dejar ir las decisiones que no dependen de uno.
– Se dice que un futbolista es una suma de la parte técnica, táctica, física y mental. ¿Es el apartado psicológico su punto fuerte?
– Yo creo que sí. Es algo que he experimentado en los últimos años. Me gusta todo lo relacionado con la importancia de la salud mental en el rendimiento. Llevo mucho trabajando este aspecto y he cogido muchas herramientas a base de leer, aprender, preguntar, formarme... No es casualidad que después de dos meses sin jugar saliese con esa valentía el día del Elche.
– ¿Es el ámbito en el que más camino queda por recorrer en el fútbol respecto a los otros tres?
– La cabeza es lo más importante en un futbolista. Siempre hay que tener buena actitud y ser positivo. Cuando mejor estoy no es porque esté más rápido o más fuerte sino porque estoy bien mentalmente. Estoy agradecido a Ibarrondo por ayudarme a descubrir los secretos de la mente. A mí me ha cambiado la vida.
– ¿...?
– Hay que aceptar las cosas que te vienen y prepararte para los momentos malos. La clave es tener calma y tranquilidad durante la tormenta para después explotar tus condiciones.
«Cada verano me han colocado fuera de la Real pero yo siempre he querido seguir y he aprovechado las oportunidades»
– ¿Cómo le afecta en lo deportivo la renovación de Rico hasta 2025?
– Desde que subí al primer equipo en enero de 2019 llevo escuchando cosas sobre el lateral izquierdo. Yo estoy tranquilo y quiero disfrutar de jugar en la Real. Luego, el que tenga que tomar las decisiones, ya hará lo que crea más oportuno para el bien del equipo.
– El primero con el compitió fue con Theo Hernández y le sentó en el banquillo. ¿Qué piensa ahora cuando echa la vista atrás?
– Que el fútbol consiste en eso, en aprovechar el momento. Yo lo hice bien, el equipo acabó fuerte la temporada y guardo un buen recuerdo de aquella experiencia.
– ¿Por qué se habla tanto de los laterales en la Real?
– Es una posición a la que se le exigen muchas cosas y requiere de jugadores muy completos.
– Antes se decía que era el puesto más barato...
– No lo sé. Todos las posiciones son difíciles. Si me pones de mediapunta no lo haré tan bien como el que juega ahí, pero si al mediapunta le pones de lateral también sufrirá. En los últimos años se ha hablado mucho de esa posición pero estoy acostumbrado. Yo lo que tengo que hacer es centrarme en mí y respetar decisiones que no está en mi mano tomar.
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– ¿Se os valora ahora más a los defensas por el aspecto ofensivo que por el defensivo?
– Hacia atrás llevamos unos años que estamos muy bien. El equipo es mucho más sólido y cada vez encaja menos goles. Hacia arriba creo que también hemos aportado.
– ¿Cómo afecta al lateral jugar en rombo a hacerlo con un extremo en la misma banda?
– Con el rombo, en ataque no tienes a un extremo abierto en el que apoyarte y tienes que ser más cauto a la hora de subir, sobre todo si el lateral contrario está montado arriba. Por otra parte, al tener toda la banda libre tienes más opciones para ser más profundo, por lo que tienes que hacerlo todo con más determinación. Quizás tienes que subir menos veces pero mejor.
– ¿Y en lo defensivo?
– Ahí falta el segundo jugador de banda que te da el 1-4-3-3 pero lo compensas con las ayudas de los interiores o el pivote.
– Parece que la Real está mirando laterales zurdos...
– Escucho de todo. Estoy acostumbrado a esas situaciones y no tengo miedo a nada. Mi actitud en estos años ha sido la de aprovechar cada día en Zubieta como si fuese el último. Me queda un año de contrato, hasta 2024, y la opción de otro más, creo que condicionado a jugar un número de partidos. Me llegan muchas cosas, no sé qué estará haciendo el club pero no me preocupa.
– ¿Espera vivir un verano más tranquilo que los dos últimos?
– Lo primero es ver cómo acaba la temporada, ver los minutos y la continuidad que tengo, y luego ya se verá lo que decidimos entre todas las partes. Siempre hemos ido todos juntos y nos ha ido bien.
– Suma ya cinco temporadas en el primer equipo...
– A lo tonto voy camino de ser uno de los veteranos – risas–. Cada verano me han colocado fuera de la Real pero yo siempre he querido seguir y he aprovechado las oportunidades.
– ¿Confía en volver a tenerla el domingo en Villarreal?
– Tengo esperanzas de jugar, sí. Pero me imagino que lo mismo pensará Rico. Ya veremos qué decisión toma Imanol.
– ¿Cómo llega el equipo a estos doce partidos que quedan?
– A pesar del bache de febrero encaramos la recta final bien colocados y queremos rematar la faena. Sabemos que no va a ser fácil, porque quedan muchos puntos en juego, pero lo vamos a intentar empezando por el domingo en Villarreal. Es uno de esos partidos que valen seis puntos por los que sumas y los que deja de sumar el contrario.
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