Urkullu enfría un adelanto electoral mientras el PSE no descarta un 'superdomingo' vasco
El lehendakari aclara que «de momento» no se va a anticipar la cita de las autonómicas Los socialistas vascos aseguran que no van a poner «obstáculos» si hay una decisión para fijarlos el 26-M, en otoño, o el primer trimestre de 2020
En apenas 24 horas la noria de un posible adelanto electoral en Euskadi giró ayer a tal velocidad que obligó al propio lehendakari a salir ... al paso y responder a los medios en el Parlamento Vasco para enfriar cualquier tipo de rumor. «No va a haber ahora adelanto», insistieron fuentes de Lehendakaritza. Casi al mismo tiempo, su socio en el Gobierno Vasco, no descartó ninguna fecha, ni siquiera la del próximo 26 de mayo, que convertiría la cita con las urnas en un 'superdomingo' electoral vasco y obligaría a la disolución de la Cámara de Vitoria antes del próximo martes, día 2 de abril.
Iñigo Urkullu tuvo que salir al paso del desliz avanzado la víspera por su portavoz del Gobierno de coalición PNV-PSE, al ser preguntado en una entrevista radiofónica sobre la posibilidad de adelantar las elecciones autonómicas, que en principio deberían celebrarse en septiembre de 2020. Josu Erkoreka abrió la puerta a unas elecciones adelantadas si después del ciclo electoral que se va a vivir en los dos próximos meses, con las generales del 28-A y las municipales, forales y europeas del 26-M, persiste lo que fuentes del gabinete Urkullu definen como un «bloqueo» de la oposición en Euskadi.
Más allá de hipótesis o conversaciones en baja frecuencia, que puedan existir en privado entre miembros del Ejecutivo, el lehendakari aseguró que el adelanto es una opción que no se encuentra sobre la mesa «de momento», lo que no implica que el Ejecutivo vasco no permanezca pendiente de los cambios que puedan producirse en el contexto político. Urkullu argumentó que las reacciones suscitadas por las palabras de Erkoreka son parecidas a la situación que se dio hace tres años y medio, cuando se produjeron «rumores similares» sobre la situación del Gobierno autonómico.
El lehendakari remarca que «la situación en el Gobierno Vasco es de tranquilidad absoluta»
Pastor avisa que el PSE está «preparado para lo que venga, en una situación muy favorable»
Aunque fuentes de Lehendakaritza aseguran que la situación en el Ejecutivo es de «tranquilidad absoluta», lo cierto es que desde el principio de la legislatura, el Gobierno PNV-PSE, en minoría en el Parlamento, se ha visto obligado a conseguir el apoyo de un grupo opositor en cada votación que se ha venido produciendo en la Cámara, una suma que en este momento preelectoral se antoja más difícil aún. De hecho, en las últimas semanas, los partidos han intensificado la sensación de que tienen la mayoría y han resaltado sus especificidades.
El gabinete vasco, según apuntó el propio lehendakari, realiza «reflexiones» en torno al contexto político en España y en el ámbito autonómico, así como sobre los efectos que pueden tener las elecciones generales y municipales sobre «la estabilidad y la gobernabilidad». Pero también remarcó que, al margen de esto, su Ejecutivo «está ejerciendo su labor, en cumplimiento de su programa, sin problema alguno». Urkullu trató de despejar las dudas con esta afirmación: «Mi voluntad es seguir cumpliendo el programa de Gobierno, que es lo que nos guía».
Preguntado por si el Ejecutivo continuará «hasta el último día» de la legislatura, no quiso aventurar más que un leve «veremos cuándo es el último día». «No sé si será el veintitantos de septiembre de 2020, que en principio es cuando corresponde, o cuando será en función de las circunstancias que se den; pero hoy por hoy estamos en el ejercicio del programa de Gobierno, que es lo que nos guía», zanjó.
A estas alturas de marzo, el guion del lehendakari pasa por que una vez presentados los próximos Presupuestos vascos, viendo qué situación se plantea, con unas Cuentas aprobadas o no, decidirá si tiene margen para seguir y si fija los comicios para junio de 2020, como un adelanto más bien técnico.
«A tiempo para un adelanto»
En el cruce de declaraciones políticas, los socialistas vascos fueron ayer los primeros en dar su opinión al respecto del adelanto electoral. Después llegaron las declaraciones del lehendakari y las del resto de grupos. El portavoz parlamentario del PSE-EE, José Antonio Pastor, recordó que la potestad de adelantar los comicios corresponde al lehendakari, de modo que «está en su mano tomar esta decisión». Ante esa posibilidad, Pastor remarcó que los socialistas vascos están «preparados para lo que venga, en una situación muy favorable y en condiciones de plantear la mejor oferta electoral en todos los ámbitos». Lo que sí dejó claro el parlamentario socialista es que su partido no va a poner «ningún obstáculo» a un adelanto, se produzca éste en otoño, en el primer trimestre del año que viene o incluso el próximo 26 de mayo, que, según apostilló, «todavía estamos a tiempo para ello».
Pastor quiso aclarar que el PSE-EE está «muy tranquilo, trabajando mucho desde su responsabilidad, cumpliendo con un programa de Gobierno, y vamos a seguir haciéndolo». El portavoz socialista en la Cámara vasca explicó que su partido está trabajando en el marco de un autogobierno «que nos da muchas posibilidades y lo estamos haciendo en un clima de colaboración con el Gobierno de España que ha sido posible con Pedro Sánchez y que es excepcional, por positivo, en las relaciones entre ambos ejecutivos». En ese contexto, puso como ejemplo el proyecto para la entrada del TAV en Bilbao y la nueva estación de Abando.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión