El 'Ospa Eguna' de Alsasua discurre sin incidentes pero la tormenta política no baja
Varios cientos de personas participaron en la jornada
dv y agencias
Domingo, 30 de agosto 2020, 09:02
Varios cientos de personas participaron ayer en Alsasua en el 'Ospa Eguna', la jornada organizada por diferentes colectivos afines a la izquierda abertzale para pedir la marcha de la Guardia Civil de la localidad navarra. Los actos transcurrieron sin que se produjeran incidentes. A lo largo del día sí se pudieron ver imágenes y carteles en los que se caricaturizaba tanto al instituto armado como a la Policía foral.
La jornada llegaba rodeada de grandes dosis de polémica. La Audiencia Nacional había rechazado la petición de prohibir las movilizaciones planteada por varias asociaciones de la Guardia Civil, para las que «estos actos, además de ser constitutivos de un delito de odio hacia el colectivo, pretenden perpetuar uno de los episodios más oscuros de la historia reciente y que tantas vidas costaron a los guardias civiles y a sus familiares».
La Audiencia Nacional aseguró en su escrito que «no quedaba acreditada la comisión del delito de enaltecimiento que daría lugar a la adopción de la medida cautelar en cuestión». Eso sí, ordenaba a las autoridades y fuerzas de seguridad evitar que la convocatoria se convirtiera en un acto de enaltecimiento terrorista o de humillación a la víctimas. También exigía que se elaborase un atestado sobre los hechos si fuera necesario. Los actos desarrollados ayer contaron con una notable presencia policial.
A pesar de la resolución judicial, el PP había instado al alcalde de Alsasua, Javier Ollo (Geroa Bai), a que prohibiese la jornada. Ayer mismo, la presidenta del Comité de Derechos y Garantías del partido, Andrea Levy, extendió esa reclamación al ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, y al delegado del Gobierno en Navarra, José Luis Arasti, por considerar «inadmisible» este «hostigamiento» hacia el instituto armado.
«La democracia, en riesgo»
Según la dirigente popular, se trataba de un asunto que «pone en riesgo la fragilidad de la democracia». Tras insistir en que se debe impedir esta muestra de «acoso, hostigamiento e insultos a la Guardia Civil», Levy lamentó que el Gobierno, «preso de sus socios proetarras de investidura», esté «de brazos cruzados» mientras «se coarta la libertad y la democracia de todos los españoles representados en la Guardia Civil».