El Gobierno foral rechaza la enmienda a la totalidad de EH Bildu a los Presupuestos de Gipuzkoa con los votos del PP

EH Bildu anunció hace dos semanas que rechazará las Cuentas por tener un proyecto «antagónico» al del PP y por considerar que el Gobierno foral no debía haber hecho una propuesta común a los tres partidos de la oposición por las diferencias de representación que tienen tras las últimas elecciones forales. La portavoz de la coalición abertzale, Maddalen Iriarte, ha criticado que «a este Ejecutivo le da igual mirar a un lado que al otro, y eso es muy grave porque marca el futuro de las políticas públicas».

Y les ha preguntado a Mendoza y Asensio «por qué ha sido posible un acuerdo en Álava, Navarra o España y en Gipuzkoa no». Momento en el que el presidente de las Juntas, Xabier Ezeizabarrena, ha pedido que no se hiciesen gestos desde la bancada jeltzale. Iriarte ha querido aclarar, ante las declaraciones que ayer hizo el Gobierno foral, que EH Bildu «no ha dicho que no a una oferta de 30 millones. Habéis llegado tarde y mal y no habéis sido capaces de hacer un Presupuesto adecuado».

Así, ha recordado que la ciudadanía pide una «reacción urgente y no autocomplaciente» y les ha dicho a jeltzales y socialistas que tampoco «habéis tenido la capacidad en los Presupuestos de Euskadi para apostar por la vivienda y por un Salario Mínimo Interprofesional propio». La izquierda independentista ha sido la única formación que no ha presentado una enmienda a la totalidad a las Cuentas vascas, pero no estará en un acuerdo con PNV y PSE tras no llegar ayer a un acuerdo sobre las enmiendas presentadas.

Iriarte ha vuelto a defender que «necesitamos un sistema comunitario de cuidados que no sirva para hacer negocio y que no siga aumentando las desigualdades entre los guipuzcoanos, porque eso es antidemocrático». La portavoz de la izquierda independentista le ha dicho a Mendoza que «no hemos recibido ninguna propuesta a nuestra peticiones y eso no responde a nuestras ambiciones». Además, ha reiterado los «peligros» que suponen aprobar enmiendas en materia de migración con el PP, cuando tres concejales este partido participaron en las manifestaciones en contra de las cenas solidarias de Egia.

Sin morderse la lengua y confrontando directamente contra EH Bildu, la portavoz del PNV, Maria Eugenia Arrizabalaga, ha subido el estrado avisando que «he venido a decir algunas verdades». «Hemos propuesto unos Presupuestos muy buenos», ha explicado, que contienen «528 millones de euros para servicios sociales que pongan en el centro a los ciudadanos». Y ha cargado de lleno contra la izquierda independentista al señalar que son «autoreferenciales» y que se han negado a aceptar propuestas que ellos mismos había pedido en materia de «transición ecosocial, movilidad o industria».

Arrizabalaga ha dicho que el PNV ha tenido «voluntad de cerrar un acuerdo con Bildu y con los demás partidos de la oposición hasta el último momento». «EH Bildu por lo menos ha tenido una estrategia, pero Podemos lo ha dejado de la mano de Diós». Y ha señalado que la postura de la coalición abertzale de lograr «acuerdos universales», no ha sido más que «una estrategia para lograr la centralidad y copiar lo que siempre ha hecho el PNV». Y les ha reprochado que en «Álava os habéis puesto un disfraz para pactar, pero lo que habéis hecho en Gipuzkoa no hace más que demostrar el populismo de izquierdas que estáis usando».

El PSE, que pidió a EH Bildu «recapacitar» para no depender solo del PP en los Presupuestos, ha explicado que las Cuentas «no merecen una enmienda a la totalidad. Es el presupuesto más social de la historia, el más orientado hacia la sostenibilidad y con una apuesta por el fortalecimiento y transformación de todos nuestros sectores económico». Y le ha preguntado a Iriarte si «le parece normal enmendar un presupuestos cuando están de acuerdo con el 95,6% del mismo. Todavía mantienen la resaca política del año pasado».

El portavoz del PSE-EE en Juntas, Alberto Albistegi, cree que a «EH Bildu les falta valentía política» y que «no deberían actuar reaccionando a las decisiones del PP». En esa línea, ha lamentado la línea «obstruccionista» de la coalición abertzale «por intentar imponer un veto a otros partidos en lugar de alcanzar acuerdos». Incluso ha calificado la situación como «un apartheid» político en toda regla.

El PP será la pieza clave para la aprobación de las Cuentas, como ya adelantó este periódico, y su portavoz Mikel Lezama ha sido tajante: «No es cierto que aprobar los Presupuestos con mi grupo sea replicar lo que ocurre en Madrid». Y ha respondido directamente a Iriarte: «Lo que está más cerca de Madrid es su tono». El popular ha criticado a la coalición abertzale por haberse «autoexcluido» de la negociación y por puesto «vetos». «Podían haberse quedado en la discrepancia con los contenidos, pero no han sido capaces de apoyar el Presupuesto por sus estigmas». Al contrario, ha dicho, de «lo que han hecho otras veces en las Juntas».

«Hay una diferencia real entre lo que nos gustaría y lo que es», le ha trasladado Lezama a Iriarte, y le ha trasladado que «los populares somos conscientes que somos 3 junteros de 51, pero su grupo no asume que a pesar de ser el grupo con mayor representación en las Juntas, no gobierna». Asimismo, ha pedido que no «engañe» a la ciudadanía que se puede «cambiar estructuralmente todo el sistema de cuidados». «Aunque fuesen parte de un gobierno en minoría no podrían cambiarlo de un gobierno a otro», le ha espetado el portavoz popular. Además, cree que las peticiones de EH Bildu en materia de vivienda no están justificadas porque la mayoría de competencias las tienen el Gobierno Vasco y los ayuntamientos.

«Continuismo y conservadurismo». Esas son las palabras que ha utilizado la portavoz foral de Elkarrekin Podemos, Miren Echeveste, para definir el proyecto presupuestario presentado por la Diputación, a quien ha recordado que la «la derechona del PP se muere de ganas por lanzarse a sus brazos porque no ven grandes diferencias en las Cuentas con lo que harían ellos mismos». Y se ha preguntado si «¿vamos a dar la batalla por perdida contra la derecha española?». Para Echeveste «hay batalla» hasta que el 17 se firmen las enmiendas transaccionales.

Y, a pesar de «entender que hay motivos de peso para» la enmienda a la totalidad presentada por la coalición abertzale, Echeveste cree que «aceptar el rechazo al proyecto es claudicar y no se puede tirar la toalla frente a la derecha». Echeveste también ha considerado «un grave problema» que se acuerden cuestiones sobre migración con los populares, y que con sus políticas «se conviertan en quienes solucionen el problema que tantas veces ponen sobre la mesa».