Juegos condenados

El clamor de los atletas, más una terca realidad que concede un escaso margen de maniobra, están a punto de rendir ante la evidencia al ... Comité Olímpico Internacional: los Juegos de Tokio en ningún caso podrán celebrarse en julio. El COI, reacio a modificar la fecha, decidirá en el plazo de un mes si los retrasa hasta final de año, verano de 2021 o incluso a 2022. La cita de Japón ha resistido hasta ahora por el periodo que aún resta para su inicio y por el inmovilismo de un COI aferrado a la esperanza de un rápido control de la epidemia. El retraso es la única alternativa sensata. Obliga a ello la alarmante gravedad de la pandemia, que no ofrece garantías de que la gran fiesta del deporte mundial pueda desarrollarse con público y plenas garantías, además de comprometer los propios valores olímpicos. Miles de deportistas llevan semanas sin entrenar por el confinamiento. Canadá, Australia, Gran Bretaña y Noruega han sido los primeros países en anunciar su retirada de los Juegos si se celebran este verano y es previsible que la lista se amplíe. Tokio ha invertido 35.000 millones de euros en un proyecto faraónico irrealizable hoy, salvo que irresponsablemente se opte por poner en riesgo la salud pública y por un fiasco económico asegurado.