Errenteria
Baile, música y fuego para saludar al veranoLos errenteriarras salieron a las calles para disfrutar de una víspera de San Juan en la que las tradiciones fueron las protagonistas
No había mejor manera de dar la bienvenida al verano. Cumpliendo con la tradición, Errenteria acogió la época estival con música y baile en ... la Herriko plaza. Todo arrancó a las 19.00 horas de la mano de la Banda Municipal de Txistularis, que puso la música a la soka dantza que bailó el alumnado de Herri Arte Eskola. Tras ello, tanto la banda como los bailarines se desplazaron hasta el barrio de Pontika para continuar con el rito.
Tras ello, tocó esperar un poco. No obstante, a las 22.00 horas, Iraultza Dantza Taldea repitió el cántico de Urdiain que realiza desde 1994 en la víspera de San Juan. Se trata de un rito pagano-religioso, en el que las mujeres, únicas protagonistas, visten dos faldas, atándose la segunda a la cabeza, dejando a la vista sólo el rostro y creando así una silueta extraña. Formando un corro arrancaron el cántico de 29 estrofas cuyo ritmo sigue con movimientos de manos. En la letra se mencionó la noche de San Juan, la naturaleza, la religión y la cosecha.
El objetivo del rito a pocas horas del comienzo del solsticio de veranofue doble. Por un lado, asegurar una buena cosecha y que el tiempo sea favorable durante la estación. Para lograrlo al final de la canción se gritó un conjuro, 'Orain arte behar hemendik aurrera gari'.
La jornada la cerraron los miembros de Ereintza Dantza Taldea, quienes bailaron junto a miembros de la corporación municipal la tradicional soka-dantza de la víspera de San Juan en la que los txistularis de Ereintza pusieron el ritmo.
El fuego, también presente
Además de la música y el baile, el fuego también fue uno de los protagonistas de la víspera. Y es que como manda la tradición las llamas hicieron acto de presencia. Como viene siendo habitual, y coincidiendo con el final de sus fiestas, el barrio de Fanderia dio la bienvenida al verano con una gran hoguera.
Por su parte, en la parte baja de Arramendi los vecinos de Gaztaño hicieron lo propio. Todo ello, rodeado de un ambiente festivo que este año animó el primer día de la semana.
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