Jepp Compass 4XE, un titán 'off road' que también se electrifica sin perder su carácter

C uenta con los modos de conducción eléctrica: Hybrid, Electric y E-Save. En el primero, el sistema de propulsión suele utilizar el eléctrico -siempre y cuando no se haya activado la tracción total-. Se puede circular hasta 50 kilómetros y alcanzar los 130 km/h sin que salte el motor de combustión. Por su parte, el E-Svave permite al conductor mantener la carga de la batería o aumentarla hasta el 80% con la frenada regenerativa y utilizando únicamente el bloque de gasolina. También está el botón e-Coasting, situado al lado del del freno de mano eléctrico, con el que al soltar el pedal derecho, la deceleración es más acusada, por lo que la regeneración de energía es mayor. Además, equipa una suspensión que filtra bien las irregularidades de la calzada y no mueve en demasía la carrocería.

Fuera de carretera es una maravilla. Cuenta con el modo 4WD Lock con 4WD Low -hace la función de una marcha reductora-, y el Selec-Terrain. Lógicamente, carece de diferencial -su trabajo lo hace el motor eléctrico- aunque no influye demasiado para ser capaz de llegar a lugares insospechados con gran aplomo. Por otro lado, la geometría de las suspensiones posteriores hace que los ángulos de entrada, salida y ventral, así como la altura libre al suelo, difieran algo de versiones anteriores.

La batería puede ser cargada por completo en menos de cinco horas en una toma doméstica de 2,3 kW, y en una hora y cuarenta minutos conn un wallbox de 7,4 kW. Etiqueta CERO.