Rumbo a Groenlandia
Montaña ·
Formo parte de los seis miembros de la expedición científica SOS Arctic Cero Emisiones, dirigida por el gran experto en tierras polares Ramón LarramendiLa llamada que recibí por parte de Ramón Larramendi, de raíces donostiarras, uno de los mayores expertos a nivel internacional en tierras polares, se produjo ... allá por enero de 2020. Me 'fichaba' para participar en su próxima expedición con el trineo de viento impulsado por cometas para navegar por Groenlandia y recoger muestras de hielo y aire. Me pareció el proyecto fantástico y además tenía que ver con la ciencia, algo totalmente nuevo para mí, además con la lucha contra el cambio climático. Por lo que no dudé ni un segundo en sumarme a la magnífica ocasión que se me presentaba.
Salíamos en mayo de ese mismo año. La pandemia, como millones de cosas, lo paró. Un año más tarde hemos retomado el proyecto y ya, por fin, me voy a Groenlandia. Nos vamos a navegar por el hielo del inlandsis (casquete polar) en lo que será la expedición Sos Arctic Cero Emisones de la que se dio buena cuenta en este periódico el pasado sábado tras la presentación del proyecto en la Diputación Foral de Gipuzkoa, institución que junto al Ayuntamiento de Donostia colaboran con la expedición, además de la empresa guipuzcoana Ternua.
Conocí a Ramón un día de mi cumpleaños, el 15 de agosto de 1988, cuando el responsable de deportes de aquella época en EL DIARIO VASCO me mandó a cubrir la noticia de que un joven de 22 años de Madrid llegaba a Hendaia tras 108 días de navegación desde que salió de Port Bou para circunnavegar la península Ibérica, algo que no se había hecho jamás. Después se especializó en tierras polares.
El resto del equipo lo formamos Lucía Hortal, de Tres Cantos, quien llevará el peso científico de la expedición, química de profesión con un máster en química orgánica, especializada en la búsqueda de vida en otros planeta, colaborando para el Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA); Begoña Hernández de Cartagena, licenciada en Medio Ambiente, y los alpinistas Carlos Pitarch de Castellón y el venezolano Marcus Tobía.
Nos vamos los seis a Groenlandia con las ganas y el ímpetu de desarrollar una actividad científica, con el reto que eso supone, muy animados y orgullosos de contribuir con la ciencia para conocer más sobre el cambio climático y sus consecuencias. Todo ello con el trineo de viento, el único vehículo polar sostenible y cero emisiones ofrecido a la ciencia, un trineo en constante innovación y mejora. Volamos el próximo lunes a Copenhague y el martes hacia Nasarsuaq, desde donde en helicóptero nos trasladaremos al hielo groenlandés el 5 de mayo. Haremos una travesía jamás realizada de Oeste a Este, regresando al punto de partida por lo que será un recorrido circular con un total aproximado de unos 1.500 kilómetros en unos 30 días que permaneceremos en el hielo. Se trata de la primera expedición polar alineada con los ODS, Objetivos de Desarrollo Sostenible marcados por la Agenda 2030 de la ONU. Estaremos de vuelta para 'sanjuanes'.
A partir de hoy estas columnas semanales de DV intentaré que sean el cuaderno de bitácora de mi propia experiencia en Groenlandia.
Me quedo con esta frase que expuse en la presentación: «Somos la primera generación que entiende el cambio climático, y la última que puede hacer algo al respecto» que dijo Antonio Guterres, Secretario General de las Naciones Unidas.
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