El Corte Inglés cierra una de sus tiendas en Bilbao
Los grandes almacenes dejarán el local de Gran Vía 20, un inmueble que vendieron hace 5 años y que ocupan en régimen de alquiler. A partir de ahora concentrará la oferta en su edificio principal
LUIS GÓMEZ
Miércoles, 19 de enero 2022, 07:35
El Corte Inglés emprenderá el próximo verano una nueva etapa comercial en Bilbao. Los grandes almacenes dejarán libre el edificio del número 20 de la Gran Vía y concentrarán toda su oferta en un único edificio, concretamente en su buque insignia, según ha podido saber este periódico. El principal grupo distribuidor español trasladará todas las áreas de cultura y ocio a su histórico centro de Gran Vía 7-9, según han confirmado fuentes de la compañía.
La empresa abandonará en agosto las dependencias que ocupa en régimen de alquiler desde hace cinco años, aunque las nuevas instalaciones funcionarán desde julio a pleno rendimiento en su nuevo emplazamiento. El traslado obligará a realizar una profunda adecuación y renovación de la sede, inaugurada en 1969.
La operación es un calco de la llevada a cabo en su momento en la calle Ercilla, donde la compañía presidida por Marta Álvarez mantuvo por espacio de dos décadas sus departamentos de viajes y deportes antes de regresar, en 2016, a su emplazamiento original y ocupar la séptima planta. Trabajó desde 1996 en el antiguo edificio de Galerías Preciados, propiedad del BBVA, que el banco volvió a recuperar en 2019.
Dentro de un ambicioso plan de expansión, El Corte Inglés se hizo en 2002 con el local del número 20 de la principal arteria comercial de Bilbao tras adquirírselo a la cadena británica Marks&Spencer, que pinchó en hueso en su aterrizaje en el mercado vasco, ya que solo permaneció operativo cuatro años. Sin embargo, en una intervención similar a la realizada posteriormente por muchos bancos, que se han desprendido de sus sedes para seguir trabajando en ellas en régimen de arrendamiento, lo vendió en 2018 a un fondo inversor por casi 40 millones.
5.500 metros cuadrados
Esta actuación se enmarcó en una política de venta de activos no estratégicos desarrollada a nivel nacional. El acuerdo se efectuó bajo la figura de 'sale&leaseback', por lo que los grandes almacenes españoles se comprometieron a alquilar estas instalaciones durante cinco años, periodo que ha concluido ahora.
En ese local, de 5.500 metros cuadrados, distribuidos en cuatro plantas, ofreció a los clientes productos de electrónica, informática, telefonía, fotografía, libros, discos y papelería. El desembarco se acompañó de una alianza con la multinacional electrónica Samsung, que ocupó toda la planta baja, en lo que supuso la apertura de su primera macrotienda en España. El Corte Inglés complementó este proyecto con la actividad de una cafetería de Starbucks, que compartió casi 100 metros cuadrados con la compañía tecnológica coreana, además de ocupar una terraza en la bulliciosa calle Ledesma. Además de la actividad comercial, el edificio supuso un impactante escaparate para un buen número de grupos musicales. Sus dependencias fueron escenario de importantes miniconciertos, como los protagonizados por los Gemeliers.
El proceso de reordenación, traslado y concentración de toda la oferta comercial busca, sobre todo, una optimización de los recursos y la posibilidad de facilitar la experiencia de compra a los clientes. Esta integración, que persigue también una mayor eficiencia, no tendrá ninguna repercusión laboral.
Los grandes almacenes garantizan el mantenimiento de la totalidad del empleo de Gran Vía 20, donde trabajan en estos momentos cerca de 70 trabajadores. El cambio tampoco afectará a la actividad, ya que se mantendrá íntegra, aunque ahora queda por ver dónde encajará cada sección. El traslado supondrá un importante cambio de imagen de las instalaciones al enmarcarse dentro de un ambicioso proceso de reforma y modernización.
